El propietario del criadero Altanería S.L, un centro canino de reconocido prestigio ubicado en Paracuellos del Jarama (Madrid), denuncia que viene padeciendo una campaña de acoso y derribo desde hace más de un año por parte de las protectoras vegano-animalistas ANAA y FAPAM, así como de la actriz Lluvia Rojo, conocida por la serie Cuéntame. Tras recibir numerosas amenazas por parte de los activistas, el dueño del criadero vio cómo le arrebataron a sus 192 perros de raza "sin orden judicial", explica con cierto nerviosismo a Libre Mercado.
Según cuenta José García, propietario del recinto, "de nada sirvió que previamente los técnicos del Seprona visitaran las instalaciones donde vivían los canes y elaboraran un informe a favor del centro, dejando claro que los perros estaban en inmejorables condiciones". De hecho, su abogada, Mercedes García, critica que se ha cometido una negligencia porque "hasta el juzgado de Torrejón de Ardoz dictó un Auto de Sobreseimiento que le dio la razón", después de que se sacaran 31 perros de los que dijeron que estaban maltratados: "El juez no vio el mínimo indicio de sufrimiento animal y archivó la causa".
En base a la versión de Altanería S.L, desde la Delegación de Agricultura y Ganadería se actuó conforme las entidades protectoras ordenaron. Tal y como dice la jurista, las organizaciones animalistas ANAA Y FAPAM "convencieron a los funcionarios municipales de que los perros se encontraban en malas condiciones y, con las mismas, el director de Agricultura y Ganadería, José Luis Sanz Vicente, mandó al Seprona para proceder a la incautación inmediata de los 192 de perros y la cesión provisional de los animales a las asociaciones". Dicho y hecho.
Heridas y amago de infarto
José, el empresario del criadero, habla con gran pesar de aquel fatídico día. "Vi cómo se llevaron a todos mis perros sin que yo pudiera hacer nada. Me abrí la cabeza y tuve profundas heridas al desmayarme cuando vi ese robo. Mi socio tuvo un amago de infarto y se lo llevaron en ambulancia, estuvo dos días hospitalizado. Una de mis cinco empleadas fue también trasladada por una fuerte crisis de ansiedad. Mi vida está destrozada. Me han arruinado económica y psicológicamente. ", se queja.
El Seprona ejecutó la orden de la Comunidad y cedió la custodia de todos los canes a las protectoras que allí se encontraban preparadas con sus vehículos de transporte animal. "No se respetó el procedimiento legal. De hecho, el Seprona realizó hasta un reportaje gráfico para documentar el informe y se veía que los animales estaban maravillosamente cuidados. Dio igual, allí se personaron las protectoras con los camiones y delante de José fueron introduciendo los animales en los vehículos. Él se quedó hundido", transmite Mercedes García, abogada de Altanería S.L y representante legal del propietario.
El criador, por su parte, describe a Libre Mercado su malestar: "Para mí todo ha acabado. Se llevaron lo que más quería, a mis perros, ellos lo eran todo para mí. Lo dejé todo por ellos. Yo era joyero y lo invertí todo en este criadero. Les daba el pienso más caro que hay, no como en la protectora, que les dan el peor ahora. Jamás les haría daño a mis animales. Jamás, es una injusticia", lamenta José, quien asegura que se ha pasado "días llorando".
A la espera de sentencia firme
La letrada de Altanería S.L interpuso un recurso contra la Comunidad de Madrid con el apoyo de la Federación de Asociaciones Caninas, (FAC). Antonio Zorrilla, presidente de la FAC, indica que "ha sido una actuación absolutamente negligente por parte de las asociaciones y estamos a la espera de una sentencia firme. Y, además, si hubiera sido un maltratador, ¿por qué no se lo llevaron detenido? Pues porque no encontraron nada".
Tras un año de sufrimiento para el empresario, el recurso se ha estimado parcialmente, declarando nula la decisión de la Dirección General por dos cuestiones de forma. Pero las protectoras se han opuesto a la devolución y están a la espera de lo que determine el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. "La cosa va para largo. Todavía no vamos a poder recuperar a los perros", expresa con resignación la abogada. En la misma línea se pronuncia Antonio Zorrilla, que insiste en que "ha sido una actuación absolutamente negligente por parte de las asociaciones".
La 'inquisición animalista'
Mientras, las organizaciones animalistas continúan su campaña mediática contra Altanería y su firme decisión a quedarse con los perros. Asimismo, la abogada del empresario revela a este diario la amenaza que recibió por parte de ANAA y FAPAM. "Me dijeron que si les poníamos una denuncia iban a iniciar una campaña pública contra Altanería".
Sin más dilación y así las cosas, las protectoras han iniciado una campaña en la que aparece la actriz Lluvia Rojo pidiendo que "no se deje morir a los perros en Altanería". En el spot se pueden ver unas imágenes de la Guardia Civil que, según García, "están difamando y mintiendo sobre el criadero".
"Han hecho negocio"
Pero las razones por las que las asociaciones animalistas no quieren proceder a la devolución de los animales serían bien distintas a las que expresan en sus redes sociales, según el presidente de la Federación de Asociaciones Caninas: "La mayor parte de los perros han sido vendidos. Tenemos constancia testimonial de que las protectoras han hecho negocio con los animales y vamos a llegar al trasfondo del asunto. Ambas reciben subvenciones públicas y esto no se puede tolerar", garantiza Zorrilla.
De momento, y dado que las protectoras ya han dicho que no piensan recular, Mercedes García advierte de que una vez se resuelva el caso con una sentencia firme, procederán en nombre de su representado, Altanería S.L., "a interponer las acciones judiciales tendentes a restablecer su honor y buen nombre, y la reparación del daño causado con la campaña emprendida dadas las infinitas falsedades que en la misma se han vertido de este sonrojante y gravísimo asunto".
En este sentido, la jurista dice que seguirán a la espera de que los perros regresen con su dueño, aunque reconoce que no todos podrán volver a casa. "Nos han dicho que las familias que los tienen les han cogido cariño y esos no los vamos a reclamar ya, pero el resto sí".
Además, la FAC añade que calcula que las pérdidas económicas de José superan los 300.000 euros, una cantidad que podrá ser reclamada vía judicial si no dan con una solución factible. José, sin embargo, comenta con tristeza que ni todo el dinero del mundo podrá ya reparar el daño ocasionado. "Esto es irreversible. Yo ya no me levanto, me han hundido y lo siguen haciendo con total impunidad".
ANAA y FAPAM se defienden
Por su parte, las protectoras animalistas, ANAA y FAPAM han comunicado a este periódico que niegan que se esté realizando una "campaña de acoso y derribo" contra el propietario de Altanería S.L. Añaden en el escrito enviado que "han denunciado una resolución de la Comunidad de Madrid, que ordena la devolución de 192 animales a una "PRESUNTA" maltratadora a la empresa Altanería S.L".
Ambas asociaciones explicitan que no entienden cómo la Comunidad de Madrid piensa devolver ahora a los 192 perros a su dueño si justo hace un año ordenó todo lo contrario admitiendo "que los animales estaban en presuntas condiciones insalubres". También se defienden de las acusaciones del criador: "Es totalmente falso que se le hayan "arrebatado" a sus perros "sin orden judicial". En este orden de cosas, ANAA y FAPAM aclaran que los agentes del Seprona se percataron de que el centro carecía de las autorizaciones y permisos necesarios tal y como se publicó en la web de la Guardia Civil.
En este sentido, las asociaciones desmienten que estén vendiendo los perros de Altanería S.L, tal y como señala Antonio Zorrilla, presidente la FAC. "Esto es radicalmente falso, y exigimos a la FAC que se rectifique expresamente este punto. Los animales se encuentran bajo la custodia de las Asociaciones, en casas de acogida, y lejos de "haberse hecho negocio con ellos", sostienen.
Además, las dos organizaciones anuncian que "en Guadalajara existe un proceso abierto sobre los perros retirados del criadero de Altanería S.L.
El papel de la Comunidad
Este diario ha contactado también con la Delegación de Agricultura y Ganadería de la Comunidad de Madrid con el fin de esclarecer la situación ocurrida en el criadero de Paracuellos. Fuentes de la institución autonómica han respondido que se encuentran a la espera de resolución judicial y, de momento, "no es la intención de la Comunidad de Madrid devolverlos al criadero".
"Los animales estaban en condiciones inadecuadas, con falta de control sanitario y cuidados. Nuestra intención es que no vuelvan a ese centro, aunque hay que esperar a que termine el proceso judicial". Y añaden que, "mientras tanto, mantendrán los animales en incautación hasta que no haya sentencia en relación a las posibles infracciones por abandono y maltrato de animales por falta de cuidados". El criador, por su parte, niega en rotundo tales afirmaciones e informa a este diario de que lo "único que encontraron fueron varios perros con enfermedades, pero porque eran mayores, por cuestiones de envejecimiento y de la edad". La Justicia determinará el futuro de estos canes.