La almendra central de Madrid ha pasado de ser un área más de la capital a convertirse en un espacio cerrado al grueso de los coches que circulan por las calles de la capital. Desde la entrada en vigor de estas restricciones, la contaminación ha bajado en el centro pero ha subido un 17% en los barrios colindantes.
Más allá del desempeño negativo en materia medioambiental y de la notable subida de la intensidad del tráfico provocada por el desplazamiento de la circulación a calles que ya soportaban niveles significativos de circulación, el proyecto estrella de Manuela Carmena ha generado también un encarecimiento de los precios inmobiliarios de la zona.
Cotejando los precios de venta en los garajes ubicados en Madrid Central se puede comprobar una subida de entre el 20% y el 30% en el precio de las plazas ubicadas dentro de los aparcamientos zona. Así lo han constatado empresas del ramo como Pisos.com o Parking Ya, especializadas en este tipo de transacciones.
La subida observada en las plazas de aparcamiento ubicadas dentro del perímetro de Madrid Central sería aún mayor si no se hubiese desarrollado también un mercado negro de empadronamientos y pases de entrada. Los primeros se están cerrando en 200 euros anuales, mientras que los segundos en 20 euros diarios.
¿Y qué hay de la vivienda? Como ya adelantaba Libre Mercado, el precio de compra-venta de los pisos ubicados dentro de Madrid Central está subiendo muy por encima de lo que vemos en distritos colindantes. Así, mientras que en el Barrio de Salamanca o Chamberí experimentan subidas del 8%, las transacciones en Madrid Central suben un 11,5%. Según la consultora inmobiliaria CBRE, "estos datos señalan una tendencia que puede acentuarse en el futuro".
Los pisos turísticos, en perspectiva
Aunque el Ayuntamiento de Manuela Carmena ha insistido en culpar a los pisos turísticos del encarecimiento de la vivienda en el centro de la capital, la agencia Moody’s viene de estudiar esta cuestión en detalle. La conclusión es devastadora para el consistorio, puesto que Madrid es la segunda capital europea con menos pisos de este tipo, solo por delante de Berlín y por debajo de Lisboa, París, Amsterdam, Milán, Dublín, Roma o Londres.