Cerca de 100 repartidores se han concentrado este lunes ante la sede principal de Glovo en Barcelona para protestar por la muerte de un compañero el sábado por la noche con su bicicleta, en un accidente de tráfico con un camión de basura implicado.
La concentrados por segundo día consecutivo, convocados por Riders por Derechos, han llegado a la sede de Glovo en la calle Pujades en torno a las 12, y se la han encontrado cerrada.
La concentración ha empezado sin incidentes y cerca de las 13.00h algunos riders han prendido fuego a una de las mochilas de la compañía en el cruce entre las calles Pujades y Àlaba, por lo que ambas han quedado cortadas.
Minutos más tarde, algunos concentrados han quemado dos neumáticos en el mismo lugar mientras ocupaban la calle, y después han prendido fuego a otras dos mochilas y a varias cajas.
Un grupo de manifestantes también ha tirado decenas de huevos y tomates a la fachada de la sede, momento en que se han acercado los Mossos d'Esquadra para pacificar la situación tras una discusión.
Desde el inicio de la concentración ha habido dos dotaciones de la Brimo, que no han intervenido, y también ha llegado una dotación de los Bomberos.
Glovo responde
Por su parte, la plataforma digital de reparto, ha afirmado que el repartidor atropellado mortalmente el sábado por la noche en Barcelona "no era colaborador de la compañía", ha informado en un comunicado este lunes.
La compañía ha declarado que el hecho de que el repartidor fallecido llevara una mochila de Glovo "hace suponer" que pudiera estar utilizando la cuenta de un tercero.
Además, la empresa de reparto ha anunciado que, a pesar de que el repartidor no era de Glovo, asumirá "todos los gastos equivalentes a los que hubiera cubierto el seguro privado con el que cuentan los repartidores de la plataforma".