La tabaquera británica Imperial Brands, la antigua Imperial Tobacco dueña de marcas como Fortuna, obtuvo un beneficio neto de 708 millones de libras (822 millones de euros) en los primeros seis meses de su año fiscal, finalizados en marzo, lo que se corresponde con un aumento del 35,9% en comparación con el mismo periodo del ejercicio precedente.
La facturación de la firma en su primer semestre fiscal se situó en 14.390 millones de libras (16.717 millones de euros). Por segmentos de negocio, la venta de cigarrillos de combustión y cigarrillos electrónicos alcanzó los 10.630 millones de libras (12.349 millones de euros), un 1,5% más, mientras que el negocio de distribución avanzó un 6%, hasta 4.191 millones de libras (4.868 millones de euros).
Por áreas geográficas, los ingresos procedentes de Europa se mantuvieron estables en 6.553 millones de libras (7.613 millones de euros), mientras que los originados en América avanzaron un 4,5%, hasta 1.517 millones de libras (1.762 millones de euros) y la facturación de África, Asia y Australia se incrementó un 3,9%, hasta 2.560 millones de libras (2.973 millones de euros).
"Ha sido otro semestre de buen rendimiento subyacente del tabaco, mejorado por la cada vez mayor contribución de nuestro negocio de productos de nueva generación", ha explicado la consejera delegada de la firma británica, Alison Cooper.
Del lado de los costes, los impuestos especiales sobre el tabaco se situaron en 6.961 millones de libras (8.086 millones de euros), un 0,5% más que en los primeros seis meses del ejercicio anterior. De su lado, el resto de costes asociados a los productos vendidos avanzó un 4,9%, hasta 4.613 millones de libras (5.358 millones de euros).
"Nos vamos a basar en este ímpetu para la expansión omnicanal y de nuevos productos en el segundo semestre. Hemos fijado los fundamentales de la aceleración de crecimiento de ingresos y estamos camino de lograr nuestras expectativas para el conjunto del año", ha apostillado la primera directiva de Imperial Brands.