Sacyr, en consorcio con una filial del Grupo Ortiz y con Copasa, se ha adjudicado el contrato de trabajos de mantenimiento de la línea de Alta Velocidad entre Madrid y León, y el ramal a Venta de Baños y Burgos, durante un periodo de cuatro años y por un importe de 42,98 millones de euros.
El grupo formado por las tres compañías se encargará así de la infraestructura, la vía y los aparatos asociados a la vía en un total de 436,8 kilómetros de AVE hasta el año 2022.
El objetivo del contrato es garantizar "en todo momento" el "óptimo estado" del corredor, así como su disponibilidad, eficacia, seguridad y funcionalidad, "reduciendo al máximo la probabilidad de incidencias", según informó Adif.