Sacyr concluirá el próximo mes de junio el contrato con el Canal de Panamá, toda vez que en esa fecha finaliza el periodo de tres años en que el grupo y sus socios en el proyecto se han encargado del mantenimiento del nuevo juego de esclusas tras su construcción e inauguración en junio de 2016.
La compañía y sus socios en el proyecto pondrán así punto final a la relación contractual que ha supuesto la ejecución de uno de los mayores proyectos de ingeniería civil del mundo.
"A partir de la entrega de las obras, el 31 de mayo de 2016, el proyecto ha tenido un contrato de mantenimiento durante un periodo de tres años, que se está desarrollando dentro de los estándares de calidad de operación establecidos contractualmente", indica Sacyr en su informe anual.
No obstante, la conclusión del contrato al cumplirse dichos tres años tendrá lugar mientras aún están pendientes de dirimirse reclamaciones del consorcio a la Autoridad del Canal por los sobrecostes y dificultades surgidas durante la construcción de la obra por 5.200 millones de dólares (unos 4.640 millones de euros).
De este importe 4.221,3 millones de dólares (3.770 millones de euros) corresponden a "costes imprevistos surgidos en el proyecto", y el monto restante (978 millones de dólares, unos 873 millones de euros), a "reclamaciones por perjuicios" presentadas por los socios.
El saldo de los reclamos por sobrecostes a cierre de 2018 es un 4% superior al estimado por el mismo concepto un año antes, de 4.061 millones de euros (3.625 millones de euros).
Todas estas reclamaciones están pendientes de su resolución en cuatro distintos procesos de arbitraje internacionales, según destalla Sacyr en su informe anual.
Mejoran perspectivas ante reclamos
La compañía que preside Manuel Manrique y sus socios en el proyecto estima en 2.057,8 millones de dólares (unos 1.837 millones de euros) el importe que "razonablemente" se podría "esperar recuperar" de esas reclamaciones, el 40% del total que se pide, en virtud de los cálculos realizados por la firma independiente DFL Associate.
Este importe potencialmente recuperable es ligeramente superior (en un 3,7%) al de 1.983 millones de dólares (unos 1.771 millones de euros), que la misma firma calibraba un año antes.
Del importe calculado ahora, corresponderían a Sacyr unos 736 millones de euros en virtud de la participación del 41,6% que tiene en el consorcio que en el verano de 2009 se adjudicó la construcción y posterior mantenimiento durante tres año del Canal de Panamá.
La italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la local Cusa son el resto de socios del consorcio liderado por Sacyr que construyó la ampliación del Canal mediante al ejecución de unas nuevas esclusas, un juego en cada costa, de tres niveles y con compuertas rodadas, cada una de ellas asociada un complejo de tres grandes tinas de agua reutilizable.