En enero de 2019 saltó la noticia: Jeff y MacKenzie Bezos ponían fin a su matrimonio de 25 años. Rápidamente, las calculadoras comenzaron a echar humo para calcular el coste del que es ya el divorcio más caro de la historia. No es para menos teniendo en cuenta que el fundador de Amazon tiene una fortuna valorada en unos 130.000 millones de dólares.
Jeff y Mackenzie se conocieron en 1993, hace 25 años, en una entrevista de trabajo, y solo unos meses después se dieron el sí quiero. Al poco tiempo de pasar por la vicaría, Jeff fundó Amazon. Aquí es donde reside la clave que ha hecho posible que MacKenzie se quede con el 25% de las acciones de Amazon. Aunque, según la regulación del estado de Washington, donde tienen su residencia, la esposa podría haber reclamado hasta el 50%.
En cambio, MacKenzie aseguró estar satisfecha al cerrar este matrimonio de 25 años dejando el 75% del negocio a su marido, al que le da también el voto de su porcentaje. Además, él se queda con los intereses en la empresa espacial Blue Origin y en el diario The Whashington Post.
En estos momentos, MacKenzie alcanza los 29.000 millones de dólares en fortuna personal. Sin embargo, tras el divorcio podría superar los 36.000 millones de dólares, lo que la convertiría en la tercera mujer más rica del mundo y entraría en la selecta lista de los 30 más ricos del mundo.
El divorcio se ha producido en un tono amistoso. De hecho, Jeff Bezos ha asegurado a los medios: "Estoy muy agradecido a mi familia y amigos por este acuerdo y, más que a nadie, a MacKenzie". Todo ello en mitad del escándalo sentimental que le rodea en estos momentos tras la publicación de mensajes comprometidos que intercambió con su amante. Cabe recordar que en el comunicado en el que anunciaron su divorcio ambos aseguraron que, "tras un largo periodo de exploración amorosa y una separación de prueba, hemos decidido divorciarnos y continuar compartiendo nuestras vidas como amigos", señalaron Jeff y Mackenzie.
La exesposa de Jeff Bezos es una apasionada escritora, licenciada en filología inglesa por la Universidad de Princeton, donde también estudió el CEO de Amazon. Cuando se mudó a Nueva York, realizó una entrevista de trabajo en el fondo de inversión donde Jeff trabajaba y allí surgió el amor. En el primer año de vida de Amazon, fue Mackenzie la encargada de llevar la contabilidad de la ahora empresa más valiosa en la bolsa estadounidense, pero la joven decidió dedicarse a su verdadera pasión: la escritura. En 2005, publicó su primera novela, The Testing of Luther Albright, mientras que en 2013 sacó al mercado Traps, sus dos únicas novelas.