MásMóvil quiere quedarse al margen de la guerra de precios que se disputan sus competidores en España desde hace más de un año. El consejero delegado del cuarto operador en nuestro país, Meinrad Spenger, lo ha dejado claro este jueves, en la presentación de los resultados de la compañía.
"Hemos aprendido a vivir con una presión promocional muy alta, pero nosotros apostamos por la estabilidad en los precios en lugar de por promociones puntuales para captar clientes", ha explicado el responsable de la dueña de Yoigo y Pepephone.
"Ya desde mazo del 2017 hay ofertas del 50% en el precio durante el primer año o dos" de contrato, como pueden ser las de Jazztel, "y creo que es un error continuar con esa agresividad", ha insistido.
Aunque sus precios son bajos, Spenger ha defendido la política de la empresa de evitar "sorpresas" a los clientes con subidas cuando se termina el plazo de las promociones de captación o a cambio de más gigas sin que el cliente lo pida, como hacen otras telecos. "Nosotros lo que firmamos, lo cumplimos. Nunca vamos a tocar las tarifas de nuestros clientes", ha declarado.
El responsable de MásMóvil no quiso comentar directamente las declaraciones del consejero delegado de Vodafone, Nick Read, en las que culpaba al acuerdo entre MásMóvil y Orange de algunos de los problemas de su grupo, que plantea un ERE para 1.200 empleados en España. Parte de la operativa de MásMóvil se hace a través de la línea de la compañía francesa, lo que le ha permitido tener un amplio rango de cobertura y no tener que sufragar el coste de instalar un 100% de red propia. Actualmente, el 40% de su cobertura es propia y tiene previsto aumentar esa cuota.
"Hemos demostrado que somos un operador racional que no hemos destruido valor porque no hemos hecho promociones, ni disrupción de precios. No vamos a entrar en la guerra de precios. No vamos a jugar en esa línea", ha insistido.
Sobre las relaciones con sus clientes, el directivo ha asegurado que buscan tener "un trato diferencial" y que se han planteado "el objetivo interno de reducir el numero de incidencias en un 75%", ha añadido.
MásMóvil sale de pérdidas
El directivo ha celebrado los buenos resultados de la compañía en 2018, año en el que ha logrado salir de los números rojos. En concreto, el operador amarillo obtuvo el pasado año un beneficio neto de 71 millones de euros, frente a las pérdidas de 103 millones de euros que registró en 2017.
El resultado neto ajustado de MásMóvil mejoró un 40% el pasado ejercicio, hasta situarse en 135 millones de euros, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) creció un 45%, hasta los 313 millones de euros. El Ebitda ajustado avanzó un 39%, hasta los 330 millones de euros. Respecto a los ingresos de la compañía, el año pasado alcanzaron los 1.451 millones de euros, un 12% más.
7,8 millones de clientes
El número de clientes de MásMóvil también ha subido. La compañía terminó el año 7,8 millones de clientes, un 41% más que el año pasado. De esa cifra, 6,8 millones son de telefonía móvil y un millón de banda ancha fija. Del total de telefonía móvil, 2 millones de clientes son prepago gracias a la compra de Lebara.
Sobre el número de clientes de banda ancha fija, MásMóvil lo ha duplicado respecto a 2017, cuando sólo tenía un millón de clientes. Actualmente, cerca del 70% de sus clientes consumen fibra óptica respecto al ADSL, un servicio que acabará "siendo pasado para nosotros a finales de año" cuando todo será 100% fibra. Para este año, prevé invertir 360 millones de euros, de los que 125 millones se dedicarán al desarrollo de su red de fibra propia.
Sobre la tecnología 5G, que no acaba de llegar a España, Spenger explicó que "ya hay empresas en polígonos industriales que están usando nuestro espectro", aunque "no prevemos un uso masivo del 5G antes del 2021 y, aunque estamos haciendo pruebas, no vamos a hacer inversiones relevantes antes en ese sentido". El consejero delegado de la compañía no descartó la compra de ningún otro operador virtual, aunque sí lo hizo con algún tipo de acuerdo con Euskaltel.