Desde que Manuela Carmena llegó a la alcaldía de Madrid, el consistorio ha protagonizado distintas polémicas con el Ministerio de Hacienda. El tira y afloja empezó en verano de 2015, cuando el gobierno de Ahora Madrid habló abiertamente de impagar hasta el 80% de la deuda municipal, definida por el entonces delegado de Economía, Carlos Sánchez Mato, como "ilegítima".
El pulso continuó con los reiterados incumplimientos de la Regla de Gasto, que motivaron la intervención de las cuentas del consistorio por parte del gobierno central. Ante semejante situación, Carmena terminó destituyendo a Sánchez Mato y nombrando en su lugar a Jorge García Castaño, de quien se esperaba una línea más moderada.
En el marco de ese blanqueamiento pretendido por la regidora comunista, el gobierno local afirmó a finales de enero de 2019 que el consistorio había cumplido la Regla de Gasto en 2018. Esta información implicaba que, por primera vez en la legislatura, la ejecución presupuestaria respetaba las normas de estabilidad presupuestaria desarrolladas a raíz de la reforma del artículo 135 de la Constitución Española.
Los medios de comunicación no tardaron en llevar al gran público el relato de la alcaldesa. La agencia Europa Press tituló que el Ayuntamiento "dejará de estar intervenido al cumplir la Regla de Gasto". El diario El País fue más allá y declaró que "Carmena cumple en 2018 con Hacienda". Por su parte, el canal de televisión La Sexta rotuló que "tras años incumpliendo la Regla de Gasto, el Ayuntamiento de Madrid ha cumplido con Hacienda en 2018".
Sin embargo, Libre Mercado ha tenido acceso a las cuentas remitidas por el Ayuntamiento al ministerio de Hacienda y, según dicha documentación, la ejecución del presupuesto ha vuelto a situarse en un escenario de incumplimiento de la Regla de Gasto. Para ser precisos, los gastos del gobierno superaron el máximo permitido en 10,5 millones de euros.
Para ser precisos, este periódico ha constatado que el gasto no financiero computable en 2018 fue de 3.385.617.039,98 euros, mientras que el máximo permitido para el pasado año era de 3.375.080.921,41 euros. Hay, pues, un desfase de 10.536.118,57 euros en las cuentas de Carmena para 2018.