Si no puedes con el enemigo, únete a él... o búscate a algún aliado tecnológico. Las nuevas compañías de reparto (delivery) quieren lanzar al comercio local al mundo online ofreciéndoles sus apps y también sus repartidores. En las principales ciudades españolas ya es muy habitual ver a ciclistas o motoristas llevando productos de un lado a otro a cualquier hora del día. Los han bautizado como riders.
La comida a domicilio es la reina de los repartos, pero en los últimos tiempos ha sufrido un cambio sustancial. Antes, los pedidos se limitaban a las pizzas, a los restaurantes chinos y a otras franquicias de comida rápida que tenían sus propios repartidores, pero desde la aparición de compañías como Glovo, Deliveroo o UBER Eats, cualquier local puede ofrecer a domicilio sus mejores platos.
"Las plataformas de delivery están modernizando el comercio de proximidad y la restauración. Era necesario que esto sucediera", aseguró ayer jueves el director general de la Asociación Española de la Economía Digital (Adigital), José Luis Zimmermann, en la presentación del informe "La contribución económica de las plataformas de delivery en España". El acto reunió a miembros de las empresas más punteras del sector.
"El comercio de proximidad está teniendo dificultades para poder competir con las nuevas tecnologías, y estas plataformas están consiguiendo darle la vuelta a todo, permitiendo que los consumidores también puedan recibir sus productos a golpe de clic. Estos partners tecnológicos son la única manera de que puedan competir", dijo en un claro guiño a Amazon, AliExpress o a empresas que tienen muy desarrollado su modelo online, como, por ejemplo, Inditex. Adigital representa a las plataformas de los diferentes sectores de la llamada economía colaborativa, que van desde Uber a Deliveroo, pasando por Airbnb.
Hablan las plataformas
"La comida a domicilio ha existido antes de internet y, ahora, el gran reto va a ser cómo se adapte el comercio local. Creo que aquí el retail (comercio minorista) tiene una gran oportunidad", dijo el cofundador de Glovo, Sacha Michaud. "El comercio local se ha quedado fuera del comercio online y tienen que abrazar esta idea, que sea parte de su estrategia futura. Por ejemplo, Glovo les permite llevar sus productos al cliente en 35 minutos y en España la categoría que más crece es la de supermercados, con necesidades urgentes o de última hora. Los grandes de la restauración, como McDonald’s, ya lo han captado", añadió.
"Muchas empresas quieren subirse al tren del comercio electrónico, pero no pueden. Con estos modelos harán llegar sus envíos con proximidad", apuntó Damien Bon, CEO de Stuart, una app que realiza envíos urgentes o programados con bicicletas y motos eléctricas.
Por el lado de la restauración, donde el 17% ya se comercializa a través de delivery, el general manager de UBER Eats, Manuel Pujol Olivares, destacó que para un sólo restaurante llevar su propia comida a domicilio "es muy costoso. Es como gestionar otro negocio diferente". El director de operaciones de Deliveroo en España, Darío Álvarez, destacó que "el crecimiento que están teniendo todas las empresas de nuestra plataforma demuestra el éxito" del modelo de negocio. "No competimos con el restaurante, competimos con el tener que cocinar en casa", apuntó Glovo.
La legislación laboral, su principal escollo
Los participantes coincidieron en que la falta de consenso y las rigideces de la legislación laboral de sus riders es su principal escollo a la hora de operar en España.
"El nuevo modelo de trabajo está, y no le podemos negar esa oportunidad. Nosotros pedimos unas leyes que se vayan adaptando a ello y que nos sentemos a negociar", señaló el representante de Deliveroo, que ya cuenta con 1.500 riders en España.
En este sentido, "la seguridad jurídica es un punto de fricción importante y de las 7 millones de horas de trabajo que hacemos en Europa sólo hacemos un 5% en España por la inseguridad jurídica", aseguró el de Stuart.
"El futuro del trabajo es un debate a nivel mundial. Hay que entender que para ser un glover (repartidor) no hay barreras de entrada, ni para las personas que tienen dificultades para acceder al mercado laboral, puedes estar trabajando en 72 horas. No están compitiendo con el empleo fijo o de larga duración, es un complemento", añadió Michaud. "Estamos haciendo las cosas bien y convencidos de que el modelo es correcto", añadió.
El presidente de Adigital cree que los repartidores de estas compañías "hacen un trabajo de manera independiente y lo hacen de manera mercantil. Quizá, no todo es blanco ni negro y estemos en el ámbito de los grises. Quizá es una nueva actividad, pero estamos en un terreno de inseguridad jurídica".
La contribución a la economía
El informe destaca que las plataformas de delivery han contribuido en 2018 con 643 millones de euros al PIB español y 14.337 empleos. Sus autores destacaron que, además, contribuyen a "bajar los costes reales para el cliente, ya que los restaurantes deben invertir menos en publicidad para darse a conocer". Por el lado de la demanda, otros beneficios para los consumidores son "el acceso a promociones, ofertas y a otras opiniones de los consumidores". Además, "a mayor volumen de comercios, mayor volumen de clientes, productos más amplios, variados y mayor ahorro de tiempo para el consumidor".