Se llamaba Eka Tjipta Widjaja, tenía 98 años y ha fallecido en su casa de Yakarta tras 83 años dedicados a la industria del aceite de palma. Con tan solo 15 años, el empresario comenzó a construir su imperio, que abarca negocios que van desde el papel al aceite de palma y los servicios financieros. El imperio, llamado Sinar Mas, alberga compañías como Golden-Agri Resources, una de las empresas más grandes del mundo dedicada a la producción del aceite de palma, con más de 500.000 hectáreas de cultivo en Indonesia. Según el índice de Bloomberg, Widjaja era la cuarta persona más rica de Indonesia, con un patrimonio de 8.100 millones de euros.
El empresario de origen chino empezó su negocio vendiendo galletas y sin tener ninguna formación académica, pues tan solo completó la primera etapa del colegio. A partir de los años 30 del siglo XX, Widjaja comenzó a tener un gran éxito en el negocio de las materias primas y el aceite de palma, y fue ahí cuando empezó a diversificar su empresa, conocida como Sinar Mas –que es el conglomerado que reúne a todas las firmas–. En total, el imperio construido por el asiático da empleo a 380.000 personas y ha dejado la empresa en manos de sus hijos y nietos.
Pero no todo han sido éxitos en su dilatada carrera. En 1998, el magnate se vio en la obligación de suspender pagos de 14.000 millones de dólares de su buque insignia Asia Pulp & Paper Co. Tras la caída de la dictadura de Suharto, el empresario volvió a reconstruir el imperio para colocarlo en su posición actual. Las consecuencias de la crisis financiera asiática obligaron al grupo a ceder el control de su banco insignia, el PT Bank Internasional Indonesia, después de optar por un rescate del banco central. Widjaja regresó a la banca con la adquisición de PT Bank Shinta Indonesia en 2005 y luego le cambió el nombre a PT Bank Sinarmas.
En este momento, Sinar Mas se ha visto de nuevo golpeado por el rechazo de empresas como Nestlé, Kraft o Abengoa por la deforestación causada en Indonesia debido a la producción del aceite de palma y el papel. "La marca Sinar Mas supervisa una serie de empresas que cuentan con los mismos valores corporativos e historia. No obstante, estas empresas permanecen independientes, cada una con su propia gestión, y están dedicadas a varios sectores, tales como el de pasta y papel, alimentación e industria agraria, bienes inmobiliarios y desarrollo, instituciones financieras, datos y telecomunicaciones, energía e infraestructuras. Más recientemente, Sinar Mas también invirtió en empresas digitales", destaca la firma.