El presidente de Airbus, Tom Enders, instó este jueves al Reino Unido a que clarifique su posición sobre el Brexit y advirtió de que si la salida de la Unión Europea se hiciera sin acuerdo podría llevarle a desplazar su actividad a otros países.
Enders subrayó, en un mensaje divulgado por el gigante europeo de la aeronáutica y la defensa, que "se equivocan" quienes dicen que, como Airbus tiene grandes factorías en el Reino Unido, se quedarán allí "siempre".
Si bien admitió que no es posible llevarse esas fábricas "inmediatamente", el sector aeroespacial es un negocio de plazos largos y Airbus "puede verse forzado a redirigir inversiones futuras en caso de un brexit sin acuerdo", señaló. "Hay un montón de países a los que les encantaría construir las alas para los aviones Airbus", añadió, en referencia a la principal actividad que el consorcio europeo tiene en territorio británico.
Airbus cuenta con una plantilla de más de 14.000 personas en ese país y hay unos 110.000 empleos que dependen allí de sus programas, que generan anualmente unos 6.000 millones de libras (unos 6.900 millones de euros) de facturación.
El presidente del fabricante europeo hizo hincapié en que, debido a la situación actual de incertidumbre, "el sector aeroespacial británico está ahora al borde del precipicio", porque "el Brexit está amenazando con destruir un siglo de desarrollo asentado en la educación, la investigación y el capital humano". Por eso, si la salida del Reino Unido se llevara a cabo sin acuerdo, Airbus "potencialmente tendría que tomar decisiones muy perjudiciales para el Reino Unido".
Enders argumentó que "en una economía global, el Reino Unido ya no puede seguir solo. Los grandes proyectos aeroespaciales son negocios multinacionales". Criticó que más de dos años después del referéndum de 2016 sobre el Brexit las empresas son incapaces de poder planificar su futuro porque no saben cómo se materializará la salida, y recordó que su compañía, como muchas otras, han pedido repetidamente "claridad".
El responsable ejecutivo del "número dos" mundial del negocio aeronáutico, tras el estadounidense Boeing, indicó que el mercado de la aviación crece a un ritmo del 5% anual y que su grupo "no es dependiente del Reino Unido" para su futuro y sobrevivirá pase lo que pase.
"La cuestión, resumió, es si el Reino Unido quiere formar parte de ese éxito futuro", para lo cual de producirse el Brexit debe hacerse de forma ordenada.