PETA, la organización mundial que dice luchar por los derechos de los animales, acaba de lanzar un nuevo mensaje dentro de su código ético que puede hacer temblar hasta a la feminista más acérrima. El nuevo mandamiento animalista prohíbe consumir huevos, o cualquier otro producto, que proceda de la explotación animal, pero, ojo, sólo si se trata de hembras: gallinas, ovejas, vacas... Es por ello, que el colectivo ha decidido poner a las feministas en esta tesitura: "Si son mujeres que defienden los derechos de las hembras deberán dejar de alimentarse de animales de género femenino que han sido maltratados", alegan desde PETA.
La ideóloga y artífice de esta alocada propuesta es Michelle Kretzer, quién ha llegado a afirmar en su blog que "las gallinas no son máquinas de poner huevos y deben pasar a ser consideradas individuos". Y, claro, como tales, "deben ser respetadas por las feministas si éstas lo son de verdad", defiende la bloguera de PETA.
Cabe recordar que, hace tan sólo unos días, la agrupación mundial saltaba a la palestra por pretender cambiar refranes como "coger el toro por los cuernos" o "matar dos pájaros de un tiro", al considerarlo un insulto y grave ofensa para los animales. De este modo, solicitaban a los usuarios en Twitter cambiarlo por "alimentar dos pájaros de una vez", por ejemplo.
Sí, PETA vuelve con fuerza después de haber estropeado más de un abrigo de visón a más de una celebrity por la calle y haberle declarado la guerra a la industria de los videojuegos por incluir animales virtuales entre las víctimas de los gamers.