Vizcaya, Álava, Madrid, Guipúzcoa y La Rioja tienen los mejores sistemas tributarios del panorama autonómico español. Por el contrario, el panorama impositivo menos atractivo del país está en Extremadura, Comunidad Valenciana, Asturias, Aragón y Cataluña. Así se desprende de la segunda edición del Índice Autonómico de Competitividad Fiscal (IACF).
El IACF es un informe elaborado anualmente por la economista Cristina Berechet para la Fundación para el Avance de la Libertad. El pasado año, este documento fue reconocido por la red ATLAS como uno de las mejores iniciativas del movimiento liberal europeo. Este año, el trabajo cuenta con el apoyo de la Unión de Contribuyentes y de la Tax Foundation de Estados Unidos, cuyo presidente Scott Hodge se ha desplazado hasta España para presentar las conclusiones en una rueda de prensa celebrada el 12 de diciembre en la Fundación Rafael del Pino.
Como apuntábamos anteriormente, las tres provincias vascas acompañan a Madrid y La Rioja en el top cinco del listado, con notas que van de 6,65 a 7,16 puntos sobre 10. Por abajo, las calificaciones de las regiones que salen peor paradas oscila entre 4,93 y 5,44 puntos sobre 10.
La brecha entre Madrid y Cataluña resulta especialmente llamativa. La autonomía de la capital de España logra 6,95 puntos, mientras que la región mediterránea se queda en 4,93 puntos. Igualmente destacable es la creciente diferencia entre las provincias vascas y el sistema foral navarro: Vizcaya, Álava y Guipúzcoa se anotan 7,16, 7,11 y 6,90 puntos, mientras que Navarra se queda en 5,83 como consecuencia de las subidas de impuestos aprobadas en los últimos años.
En la zona media-alta de la tabla figuran Canarias, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Cantabria. Peor es el resultado de Navarra, Baleares, Murcia, Andalucía y Galicia. En comparación con 2017, Navarra pierde tres puestos y Asturias empeora cuatro escalones, mientras que Extremadura avanza cuatro posiciones y Andalucía sube tres lugares.