"Yo gestaría para ayudar a alguien a formar su familia", "Yo gestaría por alguien a quien quiero mucho", "Yo gestaría por mi hermana y por todas las que lo necesitasen..." Estas reivindicaciones forman parte de la campaña #YoGestaría y ha sido orquestada por la asociación Son Nuestros Hijos, que defiende el derecho a la gestación subrogada.
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— Son Nuestros Hijos (@sonuestroshijos) November 28, 2018
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Más de doscientas españolas han dado la cara para ofrecer públicamente su vientre a aquellas personas que no puedan tener un hijo. El eslogan elegido, "Nosotras parimos, nosotras decidimos", es el mismo que utilizaban las feministas para apoyar el aborto. De esta forma, responden a los grupos feministas actuales que desean con ahínco impedir que las mujeres puedan ayudar con su capacidad reproductiva a otras familias a tener un bebé, y así lo manifestaron el pasado domingo en el Día Internacional contra la Violencia a las Mujeres.
Esta contradicción, en la que ahondan las organizaciones feministas, es duramente criticada por la asociación Son Nuestros Hijos y las féminas que aparecen en la campaña. "La visión que está teniendo el feminismo actual me duele porque ellas hablan por todas las mujeres. Yo soy feminista y sus palabras no tienen nada que ver con lo que yo pienso. Yo sólo digo que quiero ser libre en España y lo hago con total consciencia. Nadie me convence de nada raro, soy una mujer de cuarenta años madura y tranquila que puede y quiere tomar sus decisiones, es lo único que pido y que les reprocho. La voz actual del feminismo sólo habla de una versión, pero la nuestra también es posible. Si somos libres para abortar, somos libres para gestar. Ellas no nos pueden marcar cómo utilizar nuestro cuerpo", expone Chari Rodríguez, una de las protagonistas de la campaña #Yogestaría de la asociación.
Ella misma explica por qué ofrece su vientre: "Fue a raíz de ver cómo una pareja de amigos trajo su bebé a España gracias a la maternidad subrogada. Cuando vi la cara de la niña que han traído y la felicidad que se ha generado en ese hogar, he decidido querer formar parte de esa alegría y me he ofrecido para ser gestante", narra con entusiasmo.
Otra voluntaria para gestar de forma subrogada es Aurora. La historia de su amiga "la conmovió" y no se lo pensó dos veces: "Mi amiga padeció una dura enfermedad que la dejó sin útero. Su gran ilusión es tener un hijo y yo quiero hacerle ese favor. Me encantaría poder gestar para ella y darle el bebé que tanto añora. El gobierno socialista nos ha defraudado por completo estando rotundamente en contra de que podamos disponer de nuestras vidas y felicidad", explica seriamente.
Las gestantes empapelan Madrid
La asociación Son Nuestros Hijos está dispuesta a hacer entender a gobernantes como la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, o la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, que la gestación subrogada debe ser regulada de una vez por todas. Y si los políticos o las feministas no quieren escuchar sus reivindicaciones, lo cierto es que no podrán evitar leer sus mensajes si caminan por Madrid.
La gran capital ha sido empapelada con más de 2.000 carteles con la línea argumental de la campaña feminista que abogaba por el aborto. Hasta la Gran Vía madrileña han llegado sus mensajes, y a lo grande.
Ahora, las gestantes han desmontado su realidad contraatacando a través de las propias ideas feministas. "Hemos dicho basta. Estamos hartos de aguantar los continuos ataques contra las mujeres que gestan, nuestros hijos y familias. Hemos dado voz a las mujeres que defienden su libertad. Pretenden silenciar a las que no piensan como ellas. Pues no lo van a conseguir", afirma contundente, Marcos Jornet, presidente de la asociación Son Nuestros Hijos.
"Es paradójico porque eres libre sólo para un sentido, no para dar vida". "La acogida está siendo muy buena, no paran de llegarnos vídeos de féminas que se están sumando, estamos muy ilusionados porque son muchísimas las que quieren ayudar a construir una familia", señala Jornet.