La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha desestimado una consulta formulada por el Ayuntamiento de Madrid sobre una oferta de trayectos al aeropuerto que Uber lanzó en el verano de 2017, al considerar que este servicio no atentó contra la competencia al no suponer una competencia desleal.
En su resolución, del pasado 4 de octubre, el superregulador descarta que "Uber tenga una estrategia predatoria, encaminada a eliminar a los competidores del mercado".
"Se trata de un nuevo agente entrante en el mercado, con una red de vehículos y una cuota mucho más reducida que otros competidores", añade.
"Además, la limitación impuesta por la normativa a la concesión de nuevas licencias de vehículo de alquiler con conductor (VTC) reduce considerablemente la capacidad de Uber de incrementar significativamente su oferta, lo que, a su vez, reduce la probabilidad de que pueda expulsar a sus competidores en la prestación de servicios de intermediación del taxi y las VTC", argumenta.
En su resolución, a la que tuvo acceso Europa Press, la CNMC "no ve indicio alguno" de que el servicio de Uber denunciado estuviera por debajo de coste. Tampoco detecta el resto de circunstancias que la ley establece para considerar una competencia desleal, como son tener una fuerte posición de mercado, realizar la práctica de forma continuada y sistemática, expulsar del mercado al competidor o afectar al interés público.
Por contra, la comisión insiste en que la "dinámica competitiva" que se está generando con las plataformas de VTC "repercute en una mejora para el consumidor final en forma de menores precios, creciente disponibilidad, mayor información y mejor servicio".
"Las promociones como la denunciada de Uber es reflejo del aumento de la competencia en el sector, que está incrementando la eficiencia y permite satisfacer una creciente demanda de movilidad en el complejo entorno urbano", asegura el órgano que dirige José María Marín Quemada.
La resolución de la CNMC parte de la consulta que el Ayuntamiento de Madrid le planteó en julio de 2017. El Consistorio cuestionaba si la oferta 'UberAirport' que la firma lanzó entonces, por la que realizaba trayectos al aeródromo a 15 euros y practicaba descuentos para servicios a estaciones de tren y autobuses, era "anticompetitiva por estar por debajo de costes con el único propósito de captar viajeros mediante competencia desleal y desviar clientela de un agente del mercado".
Nuevo respaldo a Uber
La CNMC vuelve así a posicionarse del lado de las VTC, después de manifestarse en contra de las dos regulaciones del sector aprobadas por los dos anteriores gobiernos, que incluso recurrió ante el Tribunal Supremo. El Alto Tribunal avaló no obstante la primera de ellas, la que establece la proporción legal para otorgar licencias a razón una de VTC por cada treinta de taxis.
La comisión emitió esta nueva resolución sobre el sector días después de que el pasado 28 de septiembre el actual Ejecutivo aprobara una nueva normativa. Esta nueva ley permite a comunidades y ayuntamientos entrar a regular las características y condiciones del servicio de las VTC, al igual que hacen con las del taxi, y además les abre la puerta a limitar también licencias en cuatro años.
Además, la CNMC resuelve esta consulta del Ayuntamiento de la capital del pasado año, mientras que en septiembre también le cuestionó respecto a la iniciativa de viajes gratis que Uber, Cabify y el resto de firmas del sector lanzaron unos días antes de que se aprobara la nueva ley del sector.
Madrid es, según el registro oficial del Ministerio de Fomento, la ciudad con más licencias de VTC, dado que, de hecho, copa casi la mitad del total nacional.
Al cierre de septiembre, las firmas como Uber y Cabify tenían 6.076 coches en la capital, lo que arroja un ratio de un coche por cada algo más de dos taxis madrileños. Esta proporción multiplica por más de once veces el número de vehículos con que debería contar según la cuota legal.