Primero fue la confianza del consumidor y ahora la de los empresarios. El Indicador de Confianza Empresarial Armonizado (ICEA), cuya publicación corresponde al Instituto Nacional de Estadística (INE), bajó un 1,7% en el cuarto trimestre de este año en relación al trimestre anterior, su mayor retroceso trimestral desde el inicio de la serie, en 2013.
El descenso de la confianza en el cuarto trimestre, que contrasta con los avances logrados en los dos trimestres anteriores, se debe tanto al empeoramiento del indicador de situación actual como al de expectativas. En concreto, el balance de expectativas (diferencia entre las opiniones de los empresarios optimistas y los pesimistas) se situó en +2,9 puntos, por debajo de los +7,1 puntos del trimestre anterior.
Esto se debe a que el porcentaje de establecimientos empresariales que piensan que la marcha de su negocio será favorable entre octubre y diciembre de este año se ha situado en el 19%, cifra inferior a la del trimestre anterior (22,8%). Al mismo tiempo, el porcentaje de empresarios que opinan que su negocio marchará de manera normal ha subido desde el 61,5% al 64,9%, mientras que los empresarios que se muestran pesimistas sobre la evolución de su negocio han aumentado desde el 15,7% del trimestre anterior al 16,1%.
Empeora la percepción
Por su parte, el balance de situación (diferencia entre respuestas favorables y desfavorables respecto al trimestre finalizado) ha bajado casi tres puntos, pasando de +5,9 puntos en el trimestre anterior a +3,1 puntos en el cuarto trimestre.
Este empeoramiento de la percepción sobre la situación actual es resultado del aumento de establecimientos empresariales que piensan que su negocio evolucionó de manera desfavorable en los tres últimos meses y del retroceso de los que opinan que se comportó de manera favorable.
Así, en cuanto al trimestre ya finalizado (tercer trimestre de 2018), el ICEA muestra que el 20,7% de los establecimientos empresariales tienen una opinión favorable sobre cómo funcionó su negocio en esos tres meses, frente al 17,6% de establecimientos que han apreciado una evolución desfavorable en este periodo y al 61,7% que hablan de normalidad.
El ICEA, que tiene una periodicidad trimestral y es comparable a nivel europeo, se elabora a partir de una muestra representativa de establecimientos empresariales. Durante el cuarto trimestre del año, la confianza empresarial bajó en todos los sectores, en todos los tamaños de establecimientos y en 13 comunidades autónomas.
Transporte y hostelería
Así, de acuerdo con los datos de Estadística, los cinco sectores económicos analizados en este trimestre recortaron la confianza, principalmente el transporte y la hostelería (-2,7%) y la industria (-2,5%). Le siguen el comercio (-1,6%), otros servicios (-1,1%) y construcción (-1%).
En cuanto al tamaño de los establecimientos, la confianza empeora un 2,1% en los de 50 a 199 asalariados; un 1,9% en los de 200 a 999 trabajadores; un 1,7% en los establecimientos de 10 a 49 asalariados; un 1,6% en los de menos de 10 trabajadores, y un 0,5% en los de más de 1.000 asalariados.
Por comunidades, la confianza empresarial subió en Galicia y La Rioja (+1,1%) y en Canarias (+0,3%), se mantuvo en Aragón y bajó en el resto de regiones, principalmente en Baleares (-4,7%), Navarra (-4,3%) y Murcia (-3,3%). Para la elaboración de este indicador se toma como referencia metodológica la OCDE, el Ifo alemán y, sobre todo, el Tankan japonés, que elabora el Banco Central del país nipón.