La friolera de 1.200 ayuntamientos, el 15% del total nacional, van a sufrir una revisión catastral que podría traducirse en una subida de impuestos, tal y como ha publicado El Independiente con los datos recogidos en la Orden del Boletín Oficial del Estado del pasado 29 de septiembre. El Ministerio de Hacienda ha sido el encargado de publicar la orden preceptiva prevista en la Ley para aplicar posibles subidas catastrales que repercutirán en una alteración de la recaudación de los ayuntamientos por la vía de tributos como Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI).
Algunos de los consistorios que podrían tener que subir el IBI son Badalona (Barcelona), Cádiz, Santander, Guadalajara, Avilés (Asturias), Granada, Huesca, Lorca (Murcia), Coslada (Madrid), Las Rozas (Madrid) o Valencia.
Lo que no queda claro es si la revisión será al alza o a la baja, ya que depende del coeficiente que se aplique. Actualmente, el precio del metro cuadrado de la vivienda libre se sitúa en 1.587,9 euros, el valor más alto desde el segundo trimestre de 2012, según datos del Ministerio de Fomento, que toma como referencias los valores de tasación.
Las viviendas valoradas en 2012 habrían aumentado su valor, por lo que podría traducirse en una subida del IBI. Mientras que las valoradas entre 2008 y 2012 habrían perdido valor. La subida o bajada del tributo depende, exclusivamente del último año en el que el Ayuntamiento aplicase la revisión total del Catastro. Hay consistorios que no han actualizado todos los valores catastrales entre 1984 y 2003, esos vivirán subidas. En el peor de los casos, aquellos municipios que realizasen la última revisión antes de 1990, la subida del IBI podría ser de un 8%.
El valor catastral de una vivienda es la referencia sobre la que se tributa a nivel municipal por el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), una de las principales fuentes de financiación de los ayuntamientos. Son precisamente los ayuntamientos quienes tienen que solicitar una revisión del Catastro y el ministerio de Hacienda la autoriza cuando se cumplen los requisitos fijados. En 2017, fueron 2.500 ayuntamientos quienes solicitaron una revisión en la que se subieron y bajaron los impuestos, según la vivienda. Para 2018, se calcula que 1.200 consistorios actualicen el Catastro.
Por otro lado, este año se han conocido los resultados del Plan de Regularización Catastaral (PRC) que inició el Ministerio de Hacienda en 2013. Este programa tiene como finalidad hacer aflorar inmuebles y alteraciones practicadas en los mismos, a veces se han llevado a cabo las revisiones utilizando drones. Esta herramienta ha sido una gran fuente de financiación ya que el año pasado se regularizaron 1 millón de viviendas, lo que se tradujo en una recaudación de 700 millones de euros extra.