En los últimos días, los titulares de muchos periódicos se despedían de la gasolina y del diésel para siempre. Ya en el cuerpo de las noticias, los medios alertaban de que los nombres de los carburantes Gasolina 95, Gasolina 98 y Diésel iban a ser sustituidos en las gasolineras por unas indescifrables etiquetas. Este caos para los conductores se produciría a partir del próximo 12 de octubre. Y nada se podría hacer para evitarlo.
Pues bien, la realidad es que las etiquetas que hacen referencia a los carburantes de toda la vida van a seguir en su sitio. La única novedad es que a partir del 12 de octubre se va a añadir en los surtidores y boquereles otra pegatina homologada para toda la Unión Europea que informa de la cantidad de biocombustible que lleva el carburante. Es decir, las etiquetas serán complementarias.
Lo que ha sucedido es lo que se conoce como fake news, y la llevan difundiendo una larga lista de periódicos y televisiones desde el pasado mes de julio. "Fue una agencia la que lo sacó en julio y ya entonces mandamos un comunicado desmintiendo que las gasolineras fueran a cambiar el nombre de los carburantes. Llamé personalmente a muchísimos medios y ahora lo han vuelto a publicar. Hasta me lo he encontrado hace unos días en el Informativo de TVE ¡No entiendo cómo no llaman para contrastar!", denuncia en Libre Mercado el secretario general de la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio (AEESCAM), Víctor García. Fuentes del departamento de comunicación de AEESCAM, aseguran que llevan "toda la semana llamando a medios para que rectifiquen la información".
"El biocombustible es un carburante que no es fósil. Procede de los vegetales, como el cereal o la remolacha", explica García. En España, se usa en un pequeño porcentaje "desde hace mucho" en las gasolinas, pero cada tipo de vehículo tiene un máximo de biocombustible recomendado. El experto añade que "aunque contamina igual que los fósiles, los defensores del biocombustible argumentan que, al plantar los vegetales, estos absorben CO2 de la atmósfera", lo que es más beneficioso para el medio ambiente.
¿Cómo son las nuevas etiquetas?
Teniendo claro que las nuevas etiquetas van a convivir con las anteriores es interesante conocer su significado. La primera clave es que se dividen en tres formas geométricas: el círculo para las gasolinas, el cuadrado para el gasóleo y el rombo para los combustibles gaseosos. Todas serán en color blanco y tendrán unas dimensiones mínimas de 13 mm de diámetro para el boquerel y de 30 mm para el surtidor.
Respecto a la gasolina, dentro del círculo pueden llevar los siguientes números:
- E5: son combustibles que llevan un máximo del 5% de etanol. "Aquí están las Gasolinas 95 y 98 y serán etiquetas las más comunes", apunta García.
- E10: significa que el vehículo puede utilizar gasolina que contenga hasta un 10% de etanol.
- E85: significa que el vehículo puede utilizar gasolina que contenga hasta un 85% de etanol.
La presencia de los combustibles de gasolina E10 y los E85 es marginal en nuestro país. "Sólo están en el 0,6% de las gasolineras de España. El biocombustible lo usan, por ejemplo, conductores que compiten en un rally porque el etanol fomenta más la combustión y aceleran más rápido", explica.
Por el lado del gasóleo, en el cuadrado aparecerán:
- B7: significa que el gasóleo contiene hasta un 7% de biodiésel. Es el gasóleo estándar.
- B10: significa que el vehículo puede utilizar gasóleo que contenga hasta un 10% de biodiésel.
- XTL: es un tipo de combustible diésel parafínico fabricado a partir de material fósil o renovable que permite obtener por síntesis o hidrotratamiento, un combustible muy similar en composición al combustible diésel fósil tradicional.
Los combustibles gaseosos representados con un rombo hacen referencia al hidrógeno, al gas natural comprimido, al gas natural licuado o al gas licuado de petróleo.
La nueva legislación europea exige también que los nuevos vehículos comercializados por primera vez o matriculados a partir del 12 de octubre de 2018 lleven la pegatina. Para ello, los fabricantes están situando las etiquetas visibles en la proximidad del tapón de llenado o de la tapa del depósito de los nuevos vehículos. De cara al futuro, "no está previsto que desaparezcan los nombres de Gasolina 95, 98 y Diésel. Eso va a estar toda la vida", tranquiliza García al usuario.