Magdalena Valerio, ministra de Trabajo, se ha reunido con las principales asociaciones de autónomos nacionales para estudiar una nueva reforma del Régimen Estatal de Trabajadores Autónomos (RETA) que entraría en vigor en 2019. Por el momento, el debate quedará abierto en el Congreso para estudiar una reforma que consiga la aprobación de la Cámara, algo que no será sencillo debido a la fragmentación parlamentaria.
En cualquier caso, las bases del nuevo RETA serán crear cinco tramos de cotización para adecuar los ingresos y las cotizaciones a la Seguridad Social de los trabajadores por cuenta propia. La otra medida adicional será de la de acabar con la tarifa plana que aprobó el Gobierno de Mariano Rajoy para fomentar las altas de los autónomos en el régimen. Esta tarifa consiste en pagar durante los primeros 12 meses de actividad 50 euros y después subir la cotización hasta que, una vez cumplidos los dos primeros años de cotización, pagar la tarifa normal de base mínima fijada en 279 euros.
Si se llega a aprobar esta medida, entraría en vigor el 1 de enero de 2019. Por lo tanto, los nuevos autónomos que se acojan de aquí a final de año a la tarifa plana seguirán pagando el primer año esos 50 euros y después aumentará la cifra hasta llegar a la cuota total.
Tramos de cotización
A la espera de que el debate se abra y la reforma quede aprobada, todo apunta a la creación de cinco tramos de cotización. El primero de ellos está destinado a aquellos que ingresen menos de 10.302 euros anuales, unos 735 euros al mes. La cuota será de 50 euros durante los dos primeros años, siempre sujeto a que no se superen los 10.302 euros, ya que si se supera esa cantidad se pagarían 279 euros mensuales (la cuota fijada en el segundo tramo de cotización). En el caso de no pasar del límite los primeros dos años, la tarifa de 50 euros se podrá prorrogar hasta dos años más.
El segundo tramo de cotización es el que menos varía y está pensado para aquellos que ingresen menos de 30.000 euros anuales. En esta franja se sitúan tanto los autónomos que ganen 12.000 euros al año, como los que ganen 25.000. Ambos pagarán una cuota de 279 euros al mes a la Seguridad Social.
El tercer tramo engloba a aquellos cuyos ingresos estén entre los 30.000 y los 40.000 euros anuales. En este caso, la cuota subirá hasta los 357 euros mensuales. Esto supone que, al año, estos trabajadores abonarán 936 euros más a las arcas del Estado. El siguiente tramo regula la cotización de aquellos que ganan entre 40.000 y 60.000 euros al año, la cuota para ellos será de 417 euros, una subida anual de 1.656 euros. Finalmente, los autónomos que ingresen más de 60.000 euros durante el año tendrán que pagar 556 euros mensuales a la Seguridad Social, o lo que es lo mismo, 3.324 euros más que ahora.
En este caso se habla de la cotización por la base mínima que es la que se acogen el 85% de los trabajadores por cuenta propia. Para la base máxima, no se ha hablado de ninguna reforma por el momento. Actualmente los trabajadores que eligen cotizar por la base máxima pagan 1.137 euros mensuales.
Para la UPTA, la creación de estos tramos de cotización es algo positivo. Sin embargo, señalan que un 30% de los trabajadores por cuenta propia se verán obligados a pagar más de lo que ya pagan actualmente.
¿Cuánto paga un autónomo?
Un trabajador por cuenta propia que facture 15.000 euros anuales debe abonar 3.348 euros a la Seguridad Social y 3.150 euros en concepto de IVA, en este caso a Hacienda. En total, paga 6.498 euros a las arcas estatales. Además, habría que sumar lo pagado por IRPF, que varía en función de la renta. Sin contar el impuesto sobre la renta, este trabajador dispondría de 8.502 euros anuales una vez pagados los impuestos.