La Hacienda británica, conocida con las siglas HMRC, quiere adquirir nuevos poderes para investigar los casos de fraude fiscal. Según revelan los medios ingleses, el objetivo es poder acceder a los movimientos y datos de las cuentas bancarias de los contribuyentes para comprobar si se están pagando correctamente los impuestos.
Hasta ahora, cuando el fisco solicitaba la información bancaria, el contribuyente y, a su vez, el cliente del banco recibía una notificación que le permitía la posibilidad de ceder la información o negarse y llevar a Hacienda a los tribunales. Sin embargo, la HMRC quiere requerir los datos a las entidades sin que los contribuyentes reciban aviso alguno.
Esta medida está generando una gran polémica en el país, ya que para muchos se trata de una ofensiva fiscal muy agresiva que viola la privacidad. "El sistema que hemos conseguido, el que tenemos ahora garantiza a los contribuyentes una protección esencial, privacidad y derechos. La idea de la HMRC de solicitar información sin notificar al cliente es impactante", asegura James Daley, director gerente de finanzas al Daily Mail.
La Hacienda británica ha endurecido su lucha contra el fraude en los últimos meses. Durante el año pasado se produjeron decenas de órdenes de información a los bancos. Cuando esto ocurre, la entidad envía una notificación a su cliente para ponerle en conocimiento de que está siendo investigado por el fisco y este decide si cede los datos o no. Conocer los movimientos financieros permite saber si se está pagando la cantidad correcta del impuesto sobre la renta, el impuesto sobre las ganancias (en el caso de las empresas o autónomos) el impuesto de sociedades y el IVA.
Los funcionarios de Hacienda argumentan que el proceso de requerir esta información a los bancos es demasiado burocrático, requiere mucho tiempo y además consume "una cantidad desproporcionada de recursos". Por eso, para agilizar los trámites quieren que los datos sean cedidos en el momento que el Gobierno lo requiera. De hecho, la protección de los clientes de las entidades bancarias es una de las más fuertes de Europa. Son varios los Gobiernos de la Unión Europea que al tener que requerir información sobre algún contribuyente que esté cometiendo fraude fiscal y que tenga cuentas en el Reino Unido se han topado con un muro casi infranqueable. Por eso, el Gobierno busca dinamitar la privacidad de los usuarios.
Actualmente, cuando un banco recibe una solicitud de información por parte de la HMRC, notifica el proceso a su cliente y este puede negarse y llevar el trámite a juicio para que sea un juez quien dictamine si la entidad debe ceder los datos a Hacienda o no. Por eso, los funcionarios de Hacienda aseguran que la privacidad de los clientes es "exagerada".
John O’Connel, director ejecutivo de la alianza de los contribuyentes, se ha mostrado tajante: "Dar a Hacienda el poder de acceder a las cuentas bancarias de los contribuyentes sin notificación es un paso siniestro que menoscaba las libertades fundamentales". Por su parte, desde la HMRC se defienden: "Estamos considerando una serie de opciones para mejorar el flujo de información y verificar si se han pagado los impuestos correctamente".