Okupas asaltan un gimnasio de Barcelona "para cuidarnos y trabajar nuestros cuerpos"

Ser okupa no tiene que estar reñido con el culto al cuerpo. Estos enemigos de la propiedad privada también tienen derecho a fortalecer sus abdominales o a tonificar sus piernas. Los miembros de Ka La Trava, un grupo de okupas de Gràcia, lo saben muy bien. Por eso, se han metido en un antiguo gimnasio de este distrito barcelonés. "Para cuidarnos", se han excusado en un comunicado.

El local se encontraba vacío a la espera de que la famosa cadena low cost McFit volviera a ponerlo en marcha. "Cuando esta empresa vea el problema es posible que salga huyendo", señala a Libre Mercado el presidente y consejero del Partido Popular en Gràcia, Miquel Raposo. El gimnasio se encuentra justo encima de un mercado y, según Raposo, "los dueños de los locales no están nada contentos" con sus nuevos vecinos.

"No queremos que nuestra salud dependa de la economía", explican los okupas. En un comunicado surrealista los antisistema aseguran que su objetivo con este asalto es "poder entrenarnos sin tener que pagar una cuota mensual para mantener nuestro cuerpo en forma. Vemos la necesidad de abrir un espacio donde poder trabajar nuestros cuerpos, primar la salud sobre el nivel adquisitivo de cada una y poder formarnos en las diferentes disciplinas que nos interesan".

Informan de que se centrarán en la "autodefensa" porque creen que deben "estar preparadas" para "luchar contra la policía, los jueces, los políticos, los ayuntamientos, las negociaciones, los fascismos, el patriarcado".

Tal y como ha publicado Metrópoli Abierta, el gimnasio lleva una semana okupado. De momento, no cuenta con ninguna máquina para hacer ejercicio, pero han ofrecido un vermut a los asistentes.