Pedro Sánchez quiere llegar a la Presidencia del Gobierno por la vía de una moción de censura. La estrategia del secretario general del PSOE ha sido recibida por los mercados con un notable nerviosismo, plasmado en el repunte de la prima de riesgo y las caídas registradas en el Ibex 35 a lo largo de la jornada del pasado viernes.
Uno de los principales motivos por los que analistas, inversores y empresarios miran con escepticismo y hasta miedo la "Operación Sánchez" es la propuesta fiscal que el líder de los socialistas ha deslizado en distintas ocasiones. Y es que el secretario general del partido con sede en la calle Ferraz defiende subidas tributarias por valor de 40.000 millones de euros.
Como ya adelantó Libre Mercado, el objetivo de Pedro Sánchez es que el peso de la recaudación fiscal suba del 38% al 42% del PIB. Para lograr ese repunte recaudatorio, el secretario general de los socialistas aspira a subir el Impuesto sobre la Renta y el Impuesto de Sociedades, además de otros tributos.
Las subidas fiscales que propone Sánchez
En el IRPF, el principal golpe es el que se llevaría el ahorro. En la actualidad hay tres tramos que van del 19% al 23%, pero Pedro Sánchez quiere aumentar estos tipos fiscales hasta llegar a cotas superiores. Además, el impuesto directo por excelencia también sería revisado en el tramo superior que afecta a las rentas del trabajo, para subir del 45% al 52%.
Por otro lado, Sánchez defiende una revisión al alza del Impuesto de Sociedades. Sus propuestas en este sentido pasan por introducir un recargo aplicado al sector financiero y por crear un suelo de tributación del 15%. Cabe recordar que el tipo efectivo abonado por las grandes empresas oscila entre el 19% y el 21%.
Estas medidas serían la punta del iceberg, puesto que los documentos que ha divulgado el PSOE también defienden otras medidas recaudatorias. Ferraz quiere aumentar los impuestos especiales, así como reconfigurar el impuesto al patrimonio y generalizar la aplicación del impuesto a las herencias. En suma, una batería de subidas impositivas con la que Sánchez quiere conseguir que la recaudación crezca en 40.000 millones de euros.