La protesta en la calle está surtiendo efecto. Miles de familias llevan meses manifestándose en contra del Impuesto de Sucesiones y Donaciones que aplican algunas CCAA en comparación con las elevadas exenciones que aplican otras regiones, como es el caso de Madrid, y los gobiernos afectados empiezan a recular. Tras la rebaja aprobada por la Junta de Andalucía, ahora le toca el turno a Aragón.
El Gobierno regional de PSOE-CHA y Ciudadanos han pactado finalmente bonificar al 99% el Impuesto de Sucesiones para cónyuges e hijos que hereden hasta 500.000 euros, independientemente del patrimonio que tengan, según informa el Heraldo de Aragón. Esta reforma, pendiente de ser aprobada en el Parlamento autonómico, supondrá un recorte de 40 millones de euros en la recaudación frente a los 200 millones ingresado en 2017, según las estimaciones avanzadas por el Ejecutivo que preside el socialista Javier Lambán.
El diputado autonómico de Cs Javier Martínez ha señalado que este cambio supondrá la "supresión" efectiva del impuesto para las clases medias. Asimismo, el acuerdo también elevará el mínimo exento en el importe de las donaciones, que pasará de 75.000 a 200.000 euros entre padres e hijos cuando el dinero vaya destinado a la adquisición de la vivienda habitual. De este modo, Aragón dejará de ser la autonomía que más grava las herencias en España tras la subida que aprobó el Gobierno de Lambán en 2016.