El número de turistas residentes en España ha bajado un 11,8% en la zona turística de Barcelona en marzo, según la Encuesta de Ocupación Hotelera que ha difundido este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE), pese a que este año el periodo vacacional de Semana Santa ha caído en el tercer mes del año y no en abril, como en 2017.
La zona turística de Barcelona, una de las demarcaciones que usa el INE para dar datos de ocupación hotelera, recibió 143.844 turistas españoles en marzo frente a los 163.088 visitantes nacionales que tuvo en el mismo mes del año pasado (-11,8%). En la misma línea, las pernoctaciones también sufrieron un descenso, desde los 307.153 en el tercer mes de 2017, a las 264.391 de este año, un bajada del 13,9%.
La zona turística de Costa Barcelona, que integra las comarcas de Bajo Llobregat, Garraf, Maresme, Vallés Occidental, Vallés Oriental y Alto Penedés, también se resintió. Si en marzo de 2017 recibió 116.551 turistas residentes en España, este año fueron 111.110 (-1,2%). La reducción de las pernoctaciones fue más acusada, con una reducción del 17,3% al pasar de 266.623, en 2017, a 220.408, en marzo de 2018. La misma tendencia se puede observar en la demarcación del INE de Barcelona como punto turístico, que acota aún más su territorio. Según esa rúbrica, Barcelona recibió un 12,1% menos de turistas españoles, hasta los 132.989. Las pernoctaciones llegaron a las 245.635 (-13,2%).
La demanda extranjera sigue al alza
El turismo internacional rompe esa tendencia, y experimenta subidas tanto en número de viajeros como en pernoctaciones. En Barcelona como zona turística, los turistas de fuera de España experimentaron una subida del 5,6%, hasta los 545.425 viajeros. Las pernoctaciones de turistas no residentes no avanzaron al mismo ritmo, y solo experimentaron una subida del 1,12 hasta las 1.420.534.
En la demarcación de Barcelona como punto turístico se aprecia exactamente lo mismo, con el número de turistas extranjeros avanzando un 4,7% con respecto a marzo de 2017, hasta los 522.566 visitantes. El número de pernoctaciones se mantuvo prácticamente invariable, con un 0,5% más, hasta las 1.368.631.
El turismo nacional lastra la ocupación
A pesar de que el turismo internacional crece, y tiene un peso mucho mayor en el total de turistas que recibe Barcelona, la ciudad ha sufrido varias caídas en el grado de ocupación hotelera como consecuencia de la reducción de visitantes nacionales.
Así, en marzo el grado de ocupación por plazas en la zona turística de Barcelona fue del 63,2%, lo que representa una bajada de 3,5 puntos porcentuales con respecto al mismo mes de 2017. El grado de ocupación en fin de semana también baja hasta el 68,3% (2,8 puntos porcentuales menos), al igual que el grado de ocupación por habitaciones, que se queda en el 73,6% (5,6 puntos porcentuales menos).
En Costa Barcelona, también se experimentas bajadas en la ocupación por plazas (2,3 puntos porcentuales menos, hasta el 48,8%). Y aunque el grado de ocupación en fin de semana permanece prácticamente invariable (apenas desciende siete décimas), la ocupación por habitaciones experimenta una bajada de 3,1 puntos, hasta el 60,1%.
La mayor caída en este segmento se aprecia en la demarcación de Barcelona como punto turístico. Allí, el grado de ocupación por habitaciones ha caído 6,2 puntos porcentuales, hasta el 73,8%, con respecto a marzo de 2017.
Todos estos datos han lastrado el índice de precios hoteleros (IPH) para toda la comunidad de Cataluña. En marzo, es la única comunidad que experimenta un dato negativo, con una bajada del 1,2% frente al repunte del 4,8% en todo el país. El aumento de los precios fue liderado en marzo por Cantabria (+10,58%), la Comunidad Valenciana (+10%) y Asturias (+9,48%).
La misma tendencia se aprecia en la facturación media diaria de los hoteles por cada habitación ocupada (ADR). Mientras que en el conjunto del país subió un 5,2% (con subidas por encima del 10% en Andalucía, Asturias, Comunidad Valenciana, Galicia y País Vasco), en Cataluña cayó un 1,3%.
El ingreso medio diario por habitación disponible (RevPAR) subió un 6,1% en el conjunto del país. Y mientras en Asturias, Cantabria y Extremadura avanzó a un ritmo por encima del 25%, en Cataluña descendió un 4,9%. Fue la única comunidad autónoma que registró una bajada, junto a la ciudad autónoma de Ceuta.