El Ayuntamiento de Nueva York está elaborando un nuevo proyecto de ley que pretende garantizar el "derecho de desconexión". Lo que se pretende es restringir el envío de correos u otros mensajes laborales fuera del horario de trabajo. De esta manera, los empleados instalados en la ciudad de los rascacielos podrán denunciar a sus empresas si estas les envían mensajes fuera de su jornada de trabajo.
Además, se considerará ilegal el hecho de que las compañías pidan a sus trabajadores verificar la lectura del mail o la respuesta del mensaje. Este proyecto de ley ha sido presentado por Raphael Espinal, un joven dominicano concejal por Brooklyn y miembro del Partido Demócrata. "Si hay alguna emergencia, no se multará al jefe o a la empresa. Pero si no es una emergencia, la empresa pagará una multa de 200 ó 500 dólares por cada vez que contacte con el empleado", según informaron en el programa Pura política del canal NY1 Noticias.
¡Los jefes ya no podrán contactar a sus empleados fuera del horario de trabajo! En #PuraPolitica @JuanMaBenitez analiza esta propuesta con el concejal @RLEspinal 👉🏽 https://t.co/UXDwi5cB0s pic.twitter.com/6SNL6vJo0Y
— NY1 Noticias (@NY1noticias) March 31, 2018
Para que las compañías reciban la sanción, los trabajadores deberán denunciar el envío de correos ante el Departamento de Asuntos del Consumidor de Nueva York. Tras la denuncia, se iniciaría una investigación que podría acabar con la citada sanción.
Nueva York no es pionera
La ciudad que nunca duerme no es la primera que establece una medida de este tipo. En 2017, Francia aprobó una ley a través de la cual permite a los trabajadores ignorar los correos y mensajes laborales enviados fuera de la jornada de trabajo. La diferencia es que la normativa gala solo se aplica a las empresas con más de 50 empleados, mientras que el proyecto de ley neoyorquino es aplicable tanto para compañías con menos de 10 trabajadores en nómina como para las que tengan muchos más empleados. Un ejemplo de iniciativa privada es el de la empresa Volkswagen, que apaga todos los servidores de envío de correos cuando acaba la jornada laboral para "respetar el tiempo de relajación".
Según informó la psicóloga Julie Bort a Business Insider, los trabajadores se encuentran "emocionalmente exhaustos" por el hecho de tener que estar "siempre disponibles" para sus empresas, aunque señala que, en última instancia, la responsabilidad recae sobre los propios empleados, ya que pueden desconectar las notificaciones del correo laboral para no leer nada hasta el comienzo de su próxima jornada.