Un avión, modelo Antonov AN-12 de la aerolínea Nimbus, trataba de despegar del aeropuerto de Yakutsk, en Siberia, cuando la compuerta del avión salió disparada. Inmediatamente después de eso, comenzaron a caer lingotes de oro, diamantes y gemas. En total, se calcula que el valor de las joyas caídas ascendía a 400 millones de dólares.
Los fuertes vientos que azotan Siberia la semana pasada fueron los causantes del accidente. Al despegar, el avión comenzó a zarandearse fuertemente, sin conseguir mantener el equilibrio -aterrizó minutos después del despegue fallido-. En uno de esos vaivenes, la compuerta se rompió y comenzó la lluvia de oro, diamantes y joyas.
Los lingotes de oro y el resto de piedras preciosas quedaron esparcidas por varios kilómetros. La fuerza con la que cayeron del aeroplano y el viento siberiano comenzaron a repartir los lingotes y los diamantes por la pista de despegue, pero también por todo el terreno que hay alrededor. Tras lo ocurrido, el avión aterrizó en un pueblo situado a unos 12 kilómetros del aeropuerto para recoger el tesoro perdido. Según los medios rusos, las joyas quedaron esparcidas en un radio de 26 kilómetros alrededor de la pista.
Al parecer, el oro pertenece a una empresa minera rusa. La nieve dificultó las tareas de recogida, ya que muchas de estas joyas quedaron enterradas bajo densas capas de nieve. Finalmente, los técnicos encargados de reparar la aeronave fueron detenidos después de que la compuerta del avión saliese disparada. Un accidente que podía haber causado heridos, muertos y destrozos en las casas colindantes al aeropuerto.
At least 3 tons of gold spilled on a Russian runway after the hatch of a cargo plane accidentally flew open https://t.co/5mkowl79Rz #tictocnews pic.twitter.com/2QGDzWnQpv
— TicToc by Bloomberg (@tictoc) March 16, 2018