Llevaba meses sin cobrar la pensión. Sin luz, sin agua y sin medicamentos, Marisa no pudo más y se ahorcó en su domicilio de Asturias. Esta venezolana que había trabajado toda su vida llegó a España en busca de tranquilidad para disfrutar de su jubilación, pero el Gobierno de Maduro, desde hace 26 meses, cortó las pensiones a los jubilados que se fueron de Venezuela. Es entonces cuando comenzó el calvario para Marisa, quien pudo sobrevivir durante unos meses gracias a la ayuda prestada por sus vecinos que le llevaban comida y medicinas.
No tenía familia, nadie que pudiera ofrecerle cobertura. Sus vecinos, indignados y tristes, no se cortaron al decir que "la mató Maduro". Es un caso más, entre otros muchos, que nos cuentan los miembros de Asopeveasturias, una asociación asturiana formada por pensionistas venezolanos que llevan reclamando amargamente al régimen chavista su merecida pensión desde hace más de dos años.
Sandra Pérez asegura que pudo recuperarse de su ansiedad y depresión gracias a su hijo. "Si no llega a ser por él, no tendría nada". Esta profesora trabajó durante 31 años en Venezuela. Vino a España tras quedarse viuda. Su único hijo vivía en nuestro país. Y un día dejó de percibir su pensión. Su situación se complicó, su hijo tuvo que mudarse con ella para poder mantenerla y ahora "vive de él".
"Imagina que llevas toda la vida trabajando y el dinero por el que has cotizado no puedes cobrarlo". Esta emigrante venezolana de 65 años residente en Asturias nos muestra su pesar. "Le he trastornado toda la vida a mi hijo en España, pero no tenemos otra salida". Sandra nos cuenta que sus hermanas siguen en Venezuela. "La situación es caótica y el Gobierno español no está presionando como debiera al Gobierno venezolano. Maduro es un señor que no entra en razón, es imposible, no es normal lo que nos está haciendo".
Asopeveasturias no sólo está funcionando como un organismo de lucha de los pensionistas venezolanos en nuestro país, también tiene fines terapéuticos, ya que los afectados se apoyan psicológicamente. La situación es complicada aquí, sin ingresos, y allí, en su país de origen. Sufren por los familiares que en Venezuela se quedaron conviviendo con un régimen quebrado. En total, Asopeveasturias calcula que existen 13.000 afectados en España.
Una pensión de 8 euros al mes
"Mi hermano, el otro día en Caracas, fue a comprar algo de comer, él también es pensionista, 250 gramos de queso y jamón le costaron un millón de bolívares. Un jubilado cobra en Venezuela 248.000 bolívares. Tendrían que reunir cuatro pensiones para poder llevarse a la boca un poco de queso y jamón". Así relata Sergio Priani, el presidente de la Asopeveasturias, el drama que padecen sus familiares. Pero, la cuestión va más lejos.
Priani, economista de profesión y jubilado venezolano, nos describe lo que cobrarían en la actualidad de pensión media en España al cambio de bolívares a euros. "La crisis venezolana es tal que, ahora mismo, 30.947 bolívares suponen 1 euro". Esto quiere decir que si, por la gracia divina a Maduro, le diera por ingresar las pensiones a los venezolanos que viven en España, "cobraríamos unos 8 euros al mes, una vergüenza".
Priani y su asociación han conseguido que el Gobierno de Asturias disponga de subsidios para aquellos venezolanos que se encuentran sin cobertura económica, sin algún hermano, hijo o primo que los sustente. Para ello, "deben demostrar en una carta que el gobierno de Nicolás Maduro les niega el derecho a cobrar su pensión". Muchos de ellos ya están percibiendo unos 500 euros mensuales en concepto de ayudas. "Invito a mis compatriotas que viven en otras comunidades a que se reúnan con los gobiernos autonómicos para que puedan solventar la terrible precariedad en la que andamos inmersos, aunque sea algo temporal".
Susana, otra pensionista jubilada, relata que "casi es mejor que ni cobre la pensión y pueda seguir percibiendo la cobertura social, porque, ¿cómo voy a vivir con 8 euros al mes en España?, Maduro nos está matando".