Mariano Rajoy cree tener atada la designación de Luis de Guindos como próximo vicepresidente del Banco Central Europeo. "Hay una posibilidad muy clara", subrayó el interesado, aunque no abandonará el Consejo de Ministros hasta que el nombramiento sea oficial. Un premio de consolación por su gestión de la crisis económica después de no lograr la dirección del Eurogrupo. Noqueado por el revés, amagó con dejar el ministerio tras la primera legislatura, pero siguió al lado del presidente y ahora en el PP dan por descontado su salto a Europa.
"El escenario es que España consiga el puesto", zanjó Guindos en su comparecencia. El Ejecutivo lleva meses haciendo gestiones en este sentido y Rajoy se ha implicado directamente en las mismas, despachando con Angela Merkel y demás mandatarios de la UE. No conseguir el ansiado sillón del BCE sería un varapalo enorme, reconocieron las fuentes consultadas. Si bien, aunque "habrá lío provocado por el PSOE" en el Parlamento comunitario, no esperan problemas el día de la votación en el Consejo Europeo.
Así las cosas, confirmada su candidatura, el PP se lanzó a especular sobre su sustituto al frente del ministerio de Economía partiendo de la base de que "las quinielas no sirven de nada con Rajoy", como precisó un miembro de la cúpula. Los pasillos del Congreso fueron un auténtico hervidero. Varios diputados mentaron a Fernando Becker, amigo del presidente y que solo horas antes había anunciado que deja Iberdrola tras más de 18 años en la compañía para, en teoría, dedicarse a la docencia. Según ABC, le "entra la risa" cuando le preguntan por su posible incorporación al Consejo de Ministros. "Su salida de Iberdrola es sospechosa", según comentó un parlamentario.
El apellido Nadal también se vincula a Economía. Tanto a Álvaro Nadal, "el cerebrito del PP" hoy ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, como a su hermano Alberto, al frente de la Secretaría de Estado de Presupuestos. En las quinielas, también, Eva Valle, directora de la Oficina Económica de la Moncloa y que no falla en los viajes de Rajoy a Bruselas. Es la mujer de Alberto Nadal.
En la terna, dos nombres más del propio Gobierno. Cristóbal Montoro se toma a broma que le incluyan, según sus propias palabras en una charla informal con periodistas. Si bien, en el PP no hay quien se olvida de su "más que mejorable" relación con Guindos y de lo que "le gustaría hacerse con su ministerio". Por su buena gestión y sus vínculos con el entramado comunitario, algunos cargos populares también señalan a Isabel García Tejerina, aunque en el Ejecutivo precisan que "bastante tiene" con lograr el pacto del agua. En Moncloa deslizaron a última hora de la jornada que "sería raro que Rajoy se decantara por un ministro".
Menos conocido, pero citado con insistencia, Román Escolano. "Brillantísimo" según quienes le conocen, trabajó en el gabinete de Rodrigo Rato. Estuvo al frente del Instituto de Crédito Oficial y ahora es vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones. Josep Piqué es otro de los señalados. Según algunas fuentes, Rajoy le ofreció en su día el ministerio pero él pidió también la vicepresidencia y quedó en nada. No todos lo ven claro: "Ha sido crítico con la gestión de la crisis catalana". Rosa Sánchez-Yebra, Íñigo Fernández de Mesa o Jaime García-Legaz, hoy presidente de AENA y con muy buenas opiniones de puertas para adentro, también se cuelan en las quinielas internas.
"Pero nadie lo sabe y seguramente todos fallaremos", resumía otro miembro de la dirección del PP. Y habrá que esperar. El propio Guindos afirmó que "dimitirá inmediatamente" como titular de Economía si es elegido por el Consejo Europeo el próximo 22 o 23 de marzo. Estrenaría despacho el próximo 1 de junio y el mandato es de ocho años no renovables.
"Es el mejor candidato. Su gestión al frente del ministerio fue fundamental para la recuperación económica de España y, con ello, se garantizó la supervivencia del euro. Ha sido un actor decisivo en el saneamiento del sistema financiero y del desarrollo de la unión bancaria europea", expusieron oficialmente desde el Gobierno. Un "embajador sólido" de España y uno de los ministros "más reconocidos" en las instituciones comunitarias. En síntesis, según Rajoy, "un candidato magnífico".