En nombre de la discriminación positiva muchas leyes están cambiando en Europa, pero también en España. Lejos de plantear las mismas reglas de juego para hombres y mujeres, los varones salen perjudicados frente a las féminas. Esto ocurre en la nueva Ley de Autónomos española, en la que las mujeres tienen 5 años más para poder disfrutar de un tercer año de bonificaciones frente a los varones.
Con la entrada en vigor de la nueva normativa para los trabajadores por cuenta propia, se cambiaron algunas características de la tarifa plana. Hasta el 1 de enero de este año, los nuevos autónomos podrían acogerse a la bonificación que les permitía pagar 50 euros durante los primeros seis meses. Tras ese periodo, la cuota iría subiendo hasta llegar a pagar el 100% pasados 24 meses.
Sin embargo, las condiciones de esta tarifa plana han cambiado con la entrada del nuevo año. Ahora, funciona de la siguiente manera: una cuota de 50 euros mensuales durante el primer año; tras ese periodo se pagan 137,97 euros a la Seguridad Social; a partir del mes 18 como autónomo la cuota asciende a 192,70 euros; una vez finalizado el plazo, se comenzaría a pagar los 275 euros fijados -siempre y cuando se cotice por la base mínima-.
Ahora bien, existe una bonificación añadida para las mujeres menores de 35 años y para los varones menores de 30 años. Si el nuevo autónomo tiene menos de esa edad, podrá disfrutar de un año más de cuota reducida. De esta manera, una vez cumplido el mes número 24 como trabajador por cuenta propia, se pagarían 192,5 euros a modo de cuota hasta el mes número 36. O lo que es lo mismo, una reducción del 30% de la cuota total -fijada en 275 euros-.
Lo llamativo de esta bonificación especial para los jóvenes autónomos es que las mujeres tienen cinco años más para poder acogerse a ese tercer año de cuota reducida. En lugar de fijar la misma edad para ambos sexos, se discrimina al varón por el hecho de serlo. Esto responde a un movimiento que afecta, cada vez más, a la legislación. La discriminación positiva, es "la aplicación de políticas encaminadas a favorecer a ciertos grupos minoritarios o que históricamente hayan sufrido discriminación con el principal objetivo de buscar el equilibrio de sus condiciones de vida al general de la población", según su definición más estricta.
Lo cierto es que el número de hombres y mujeres afiliados al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos -RETA- muestra un gran nivel de igualdad. En 2017, el 53,7% de los trabajadores por cuenta propia eran varones, frente al 46,2% que representan a las mujeres.