El estrés del día a día y el hecho de que, en muchos casos, ambos padres trabajen quita mucho tiempo al cuidado de los hijos, pero esta imagen cambia si se compara la situación actual con la existente hace escasa décadas.
Así, según una investigación publicada en el Journal of Marriage and Family y recogida por The Economist, donde se analiza un total de 11 países ricos, las madres trabajadoras pasaron un promedio de 104 minutos al día cuidando a sus hijos en 2012, casi el doble que los 54 minutos registrados en 1965.
Por otro lado, aunque la dedicación de los padres sigue siendo inferior al de las madres, también ha aumentado de forma sustancial, ya que el tiempo destinado a este fin ha pasado de apenas 16 minutos en 1965 a 59 en 2012, casi cuatro veces más.
Las cifras también arrojan una brecha significativa entre las madres trabajadoras en función de si poseen o no estudios universitarios. Mientras que en los años 60, ambos grupos dedicaban casi la misma cantidad de tiempo al cuidado de sus hijos, en 2012, aquellas que cuentan con educación universitaria -excepto en Francia- gastaron 30 minutos más a esta tarea.