Violencia, desigualdad y discriminación por razón de género son algunas de las habituales denuncias que lanzan múltiples organizaciones y partidos políticos sobre la situación que, en general, experimenta la mujer en España, dibujando así una imagen bastante negativa del país sobre esta materia.
Sin embargo, el análisis de los datos y su comparación con la situación real de las mujeres en el resto del mundo ofrece un panorama radicalmente diferente. Así, el ranking internacional Women, Peace, and Security Index, que elabora el Georgetown Institute for Women, Peace and Security, coloca a España entre los mejores países del mundo para nacer mujer. En concreto, en el puesto quinto, tan sólo superado por Noruega, Islandia, Suiza y Eslovenia. En el lado opuesto, destacan los países árabes, como Siria, Afganistán y Yemen.
La clasificación compara once indicadores en relación a los niveles de inclusión, protección legal y seguridad que ofrecen los estados a sus ciudadanas. España puntúa especialmente alto en cuanto a inclusión económica, ausencia de leyes discriminatorias y nivel de seguridad, entre otros indicadores.