Gas Natural Fenosa obtuvo un beneficio neto de 793 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que representa una caída del 14,7% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, informó la compañía.
No obstante, la energética presidida por Isidro Fainé señaló que mantiene su previsión de beneficio neto anual de entre 1.300 y 1.400 millones de euros para este año, sujeto eso sí al calendario de cierre de la venta de operaciones en Italia que acordó el pasado mes de octubre con 2i Rete Gas y Edison por un importe total de 1.020 millones de euros, que le generará unas plusvalías netas de unos 190 millones de euros.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Gas Natural Fenosa a cierre de septiembre se situó en los 3.140 millones de euros, lo que supone una caída del 12,3% con respecto al período enero-septiembre de 2016. Los resultados del grupo se vieron lastrados por el negocio de electricidad en España, cuya evolución se ha visto condicionada por los factores climatológicos, con una elevada contracción de la producción hidráulica, que cayó un 72,4%, y por el impacto de los desastres naturales, principalmente en Chile y México.
El negocio de distribución de gas aportó el 42,8% del Ebitda total consolidado, la distribución de electricidad un 25,9%, la actividad de gas un 17,4% y la actividad de electricidad un 15,2%. Así, el Ebitda de las actividades internacionales del grupo representó el 50% del total consolidado, frente al 45,2% en el mismo periodo del año anterior.
En lo que se refiere a las inversiones, la cifra total entre enero y septiembre ascendió a 1.134 millones de euros, destinándose el 38,7% de ellas a la actividad de distribución de electricidad y el 32,9% a la distribución de gas. Por ámbito geográfico, las inversiones en el exterior del grupo representaron el 61% del total, mientras que en España bajaron su contribución al 39%.
A 30 de septiembre, la deuda financiera neta del grupo alcanzaba los 15.723 millones de euros y situaba su ratio de endeudamiento en el 46,5%, ligeramente inferior al del 2016, que se situaba en el 46,9%. El 93,3% de esta deuda financiera neta tiene vencimiento igual o posterior al año 2019, y la vida media de la deuda neta se sitúa en 5,5 años.
Además, a principios de agosto, la compañía acordó la venta del 20% del negocio de distribución de gas en España a un consorcio formado por Allianz y CPPIB por 1.500 millones de euros, una operación que al tratarse de una transmisión sin pérdida de control, se mantiene su integración global en el consolidado, estimándose un impacto positivo en reservas por 1.040 millones de euros. Se espera que la transacción se complete antes del 31 de enero de 2018 una vez se obtengan las correspondientes autorizaciones.
Por otra parte, la energética aumentó el peso de las energías renovables en su mix con adjudicaciones de más de 900 megavatios (MW) de eólica y fotovoltaica, que supondrán una inversión agregada de unos 900 millones de euros, de los cuales aproximadamente 500 están previstos para 2018.
Dividendo
Asimismo, la compañía destacó que mantiene su compromiso de remuneración de un euro por acción. La propuesta de remuneración al accionista, aprobada por la junta general de accionistas el pasado 20 de abril, supuso destinar 1.001 millones de euros a dividendos, el mismo importe que el año anterior. El consejo de administración aprobó el dividendo a cuenta del ejercicio 2017, de 0,330 euros por acción, que fue pagado íntegramente en efectivo el pasado 27 de septiembre.