El profesor David Veredas, de la Vlerick Business School, ha actualizado su estimación del impacto económico que está teniendo la fuga de empresas que sufre Cataluña. El pasado 7 de octubre, su primer cálculo confirmaba que el éxodo corporativo ha desembocado en un "sorpasso", convirtiendo a Madrid en la comunidad con más PIB y relegando a Cataluña al segundo puesto.
Poco a poco, hemos conocido nuevos datos de las salidas de empresas que tuvieron lugar tras el referéndum ilegal del 1 de octubre. Según la Coordinación de los Registros Mercantiles de España, ya son más de 800 las empresas que han dejado las provincias de Barcelona y Gerona en lo que va de mes. Pero estas cifras no incluyen aún los datos de Tarragona y Lérida y solo cubren los quince primeros días de octubre, de modo que la cifra real es aún mayor.
A raíz de estos traslados, el PIB catalán dejará de recoger la actividad de cientos de compañías, incluyendo firmas de gran tamaño como Gas Natural, Caixabank, Sabadell, Catalana Occidente, Abertis… Incorporando los últimos anuncios de deslocalización, David Veredas concluye que Cataluña perderá 6.730 millones de euros de actividad, en beneficio de las comunidades que pasarán a anotarse esas cifras de actividad.
Este éxodo implica un retroceso en el peso de Cataluña sobre el PIB español, que cae del 19,025% al 18,421%. Pero el impacto puede ser aún mayor si se concretan las salidas de otras compañías que ya han anunciado que están valorando un posible traslado de su sede social. Es el caso de Freixenet, Grifols, Renta Corporación, Pronovias… De materializarse estas operaciones de salida, la caída sería de 7.090 millones de euros.
Madrid, que ahora lidera el ranking de aportación al PIB, ve aumentar su cuota del 18,926% al 19,288%. Por su parte, Comunidad Valenciana experimenta un aumento del 9,434 al 9,673%. Son la otra cara de la moneda: mientras Cataluña ve reducir el tamaño de su economía en la contabilidad nacional, otras regiones viven el fenómeno contrario y aumentan su peso sobre el PIB español.
En términos de crecimiento, este deterioro va a tener un impacto notable en las previsiones de crecimiento de la economía catalana. Según el estudio de David Veredas, el crecimiento va a pasar de un escenario de expansión, estimado en torno al 3%, a uno de recesión, con un descenso del PIB que rondaría el -0,2%.
A estas cifras hay que sumarle el golpe al turismo, que Exceltur cifra ya en 1.200 millones de euros. Incorporando esa caída, derivada de un descenso del 20% en las reservas hoteleras, el retroceso del PIB es aún mayor y supone caer a una tasa negativa del 0,74%.