El grupo Lufthansa compra por 210 millones de euros la mayor parte de Air Berlin, compañía que se había declarado insolvente a mediados de agosto y en la que va a invertir 1.500 millones de euros. Air Berlin informó el jueves de que ha acordado la venta a Lufthansa de su filial de vuelos regionales LGW (Luftfahrtgesellschaft Walter), la aerolínea austríaca de vuelos vacacionales NIKI y otros 20 aviones por 210 millones de euros. La venta de partes de la compañía garantiza que se van a mantener todos los empleos en NIKI y LGW, unos 1.200, y que se abren perspectivas para miles de trabajadores de Air Berlin.
La operación todavía debe ser aprobada por los acreedores de Air Berlin, el interventor del procedimiento de insolvencia y por las autoridades europeas de defensa de la competencia en Bruselas. Air Berlin, que tiene una flota de 134 aviones y desde el 25 de septiembre negociaba en exclusiva con Lufthansa e EasyJet, sigue a flote en estos momentos con un crédito estatal de 150 millones de euros, que ahora prevé poder devolver.
También dijo que todavía negocia con la compañía británica de vuelos de bajo coste, que ha presentado una oferta por parte de la flota de Air Berlin. En caso de que se llegue a un acuerdo con EasyJet, también se abren perspectivas de nuevos empleos para más trabajadores. El consejero delegado de Air Berlin, Thomas Winkelmann, explicó:"Hemos dado un gran paso"y que una gran parte de los trabajadores tendrá oportunidades de trabajo pero que para ello es necesario que la Comisión Europea (CE) apruebe la transacción.
Los empleados de Air Berlin deberán solicitar ser contratados por Eurowings, filial de Lufthansa, y se les reconocerán los años trabajados en Air Berlin, aunque todavía no se sabe qué ocurrirá con el pago de las pensiones que corresponde a la empresa, dijo a EFE un portavoz de Lufthansa. Lufthansa ya alquila desde hace tiempo aviones de Air Berlin, incluido el personal, que utilizan su filial de vuelos de bajo coste Eurowings y, en menor medida, Austrian Airlines.
El presidente del grupo Lufthansa, Carsten Spohr, había informado anteriormente de que la primera compañía aérea de Alemania se iba a hacer con la mayor parte de Air Berlin con la adquisición de 81 aviones y 3.000 empleados por 1.500 millones de euros, luego matizó que esos 1.500 millones son los que han previsto invertir. El traspaso de los aviones y los empleados durará entre seis y nueve meses.
Lufthansa acaba de firmar el nuevo convenio colectivo con sus pilotos, con validez hasta junio de 2022, que contempla aumentos salariales y un recorte de costes del personal de cabina del 15 % porque se ha creado un nuevo sistema de pensiones que se basa en contribuciones definidas y no en beneficio definidos, como hasta ahora porque, debido a los bajos tipos de interés, la aerolínea no puede garantizar esos beneficios.
Air Berlin, que a partir del 15 de octubre va a dejar de operar todos los vuelos de largo recorrido, se declaró insolvente tras dejar de recibir apoyo financiero de Etihad Airways, su accionista mayoritario. Spohr también ha dicho que va a llenar algunos de los huecos que ha dejado Air Berlin y va a ofrecer la conexión entre Berlín y Nueva York y algún otro vuelo de largo radio.
Algunos expertos consideran que se va a producir una gran concentración en algunos recorridos porque tras la adquisición van a quedar monopolizados por Lufthansa. Por eso las autoridades de defensa de la competencia todavía deben aprobar la adquisición, que podría autorizarse con condiciones.
Air Berlin, que transportaba a unos 80.000 pasajeros diarios, va a dejar de operar con el código AB a finales de octubre. Dejó de recibir ayuda financiera de Etihad, accionista mayoritario de Abu Dabi con una participación del 29 %, debido a su mala situación. Air Berlin sufrió hasta junio una pérdida atribuida de 447,5 millones de euros, un 57,6 % más que en el mismo semestre de 2016.