El Grupo Diego Zamora ya tiene las cuatro erres: Rioja, Rías Baixas, Ribera del Duero y Rueda. La empresa murciana propietaria de Ramón Bilbao ha dado el salto al vino blanco con la inauguración de una bodega en Rueda bajo esta conocida marca riojana.
Desde que Ramón Bilbao naciera en Haro en el año 1924, no había hecho otra cosa que hacer vino de Rioja. Ahora, la compañía ha cambiado de denominación de origen por primera vez. Fue el pasado lunes cuando Ramón Bilbao quiso presentar en sociedad a su nueva área de negocio. Llegaron a Rueda hace unos 2 años, de manera silenciosa y muy distinta del evento que han celebrado hace unos días. Al acto acudieron el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, y otras muchas personalidades el sector
Una inversión de 6 millones de euros ha servido para levantar una bodega propia y empezar a cultivar 60 hectáreas de viñedos con las variedades de Verdejo y Sauvignon Blanc. Con una capacidad para producir 1,5 millones de botellas al año, en 2016 sacaron al mercado 765.000 botellas. El 75% fue a parar al mercado nacional.
El consumo de vino vuelve a subir
Este aterrizaje en tierras vallisoletanas se produce en una etapa esperanzadora para el sector del vino en España. Después de décadas de caídas, el consumo per cápita aumentó un 2,4% en 2016, según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, que sólo tiene en cuenta las ventas en los hogares. La consultora Nielsen, que sí incluye la comercialización de esta bebida en hostelería, ha calculado que las ventas nacionales aumentaron un 4,1% a cierre del pasado año.
La falta de atractivo del vino entre los jóvenes, el envejecimiento de los consumidores de este producto, la reducción de la cantidad consumida por persona y el auge de otras bebidas alcohólicas, como la cerveza, así como de las no alcohólicas, han contribuido al desplome del consumo interior en un país eminentemente vitivinícola. España es el primer exportador mundial de vino y el tercer mercado productor, por detrás de Italia y Francia, aunque los españoles consumen al año la mitad de vino que estos dos países.
¿Qué le falla al vino?
El mercado del vino "se encuentra en una encrucijada. El vino ha salido del repertorio de consumo de los jóvenes y el mayor reto es volver a atraerlos", ha asegurado el Director General del Grupo Zamora, Emilio Restoy, en una entrevista con Libre Mercado. Con su llegada a Rueda, "miramos a estos jóvenes y al conjunto de las mujeres", avanza.
"Tenemos que acabar con la sensación de que el vino es intimidante. Que es normal, porque cuando vas al supermercado o lees la carta de vinos de un restaurante, te preguntas ¿por qué hay tantos vinos? Y eso te intimida. Entonces, pides una cerveza", apunta el directivo, que reconoce que la bebida fermentada es "probablemente el principal enemigo del vino".
"Otro concepto es la refrescancia. Cada vez hace más calor, y si te quieres refrescar, pues pides una cerveza helada o un refresco con hielo. Pues vamos a trabajar con el vino para que también pueda satisfacer al consumidor. Por ejemplo, nuestro Ramón Bilbao rosado está teniendo mucho éxito con hielo, una rodaja de naranja y un poco de sirope de fresa".
A diferencia del consumidor de cerveza, que lo hace con más asiduidad, "el de vino lo toma en momentos especiales", señala Restoy. "Tenemos que cambiar ese hábito porque a la gente el vino le gusta, pero no está acostumbrada a tomarlo un día entre semana, siempre en su justa medida, ya sea porque no sabe si va a acertar con la elección o porque cree que se les va a estropear la botella, cuando con una bomba de vacío, que cuesta 3 euros, el vino te aguanta perfectamente 4 días".
El precio es otro de los factores que causa más recelo entre los consumidores. "Hay quitarle misticismo al vino. Una botella no tiene que costarte 20 euros, hay vinos estupendos en el supermercado por 5 euros, que cuestan poco más que la cerveza". El producto estrella de la firma riojana es Ramón Bilbao Crianza y tiene un precio en Alimentación que ronda los 8,5 euros.
Los creadores del Licor 43
Ramón Bilbao tiene un peso del 35% en el grupo Diego Zamora. Emilio Restoy representa a la tercera generación de los empresarios que empezaron a comercializar el famoso Licor 43, que actualmente supone otro 35%.
En 1945, los tres hermanos Diego Zamora, Angel Zamora, Josefina Zamora y el marido de esta, Emilio Restoy, se unieron para crear una empresa en Cartagena (Murcia). Desde entonces, elaboraban y vendían este licor, cuyo nombre deriva de los 43 ingredientes con los que se fabricaba originalmente. Primero en España, y después en Europa y América. No sería hasta 1999 cuando comprarían la bodega de Rioja Ramón Bilbao. En los años siguientes, adquirieron el Albariño Mar de Frades y crearon la bodega de Ribera de Duero Cruz de Alba.
Después, embarcarían en el sector de las bebidas espirituosas. Restoy recuerda como el peor momento desde que está en el cargo en la compañía, "cuando perdimos Ron Brugal en el 2009, en plena crisis". Diego Zamora distribuía esta marca en España en exclusiva. Actualmente, tienen una participación en la marca de Ron Matusalem, la propiedad de Pacharán Zoco, distribuyen la ginebra Martin Millers, entre otras firmas. "La cuarta generación va a recibir una empresa mucho mejor que la tercera", asegura Restoy, que no cree en maldiciones.