El grupo municipal de Ciudadanos en la capital de España ha registrado una iniciativa con la que se pretende evitar un sablazo fiscal que, de lo contrario, va a recaer los hosteleros de la capital. La propuesta, firmada por el edil Miguel Ángel Redondo, aboga por recortar en un 40 por ciento el gravamen aplicado en la llamada tasa de terrazas.
Este tributo, conocido formalmente como la "tasa por utilización privativa o aprovechamiento especial del dominio público local", fue instaurado en noviembre de 2001, con doce modificaciones posteriores aprobadas en el Pleno entre los años 2004 y 2016. Su aplicación no se ciñe únicamente a las terrazas, sino que también afecta a las obras, los mercadillos, etc.
¿Cómo funciona la tasa? Como explica Redondo, "la tasa por utilización de suelo público está determinada en gran medida por el índice fiscal de calles, condicionado a su vez por el valor catastral". Así, las categorías 1 y 2 soportan un gravamen de 74 euros por metro cuadrado de terraza, mientras que las 3 y 4 se quedan en 40 euros, las 5 y 6 en 21 euros y las 7, 8 y 9 en 11 euros.
Pagar el doble, de un año para otro
Según el partido naranja, "el cambio de índice de calles supone que muchos emprendedores y autónomos de Madrid paguen más del doble que el año anterior por la tasa de terrazas". Y es que, "aunque se han revisado los valores catastrales de 22 de los 107 barrios de Madrid y esto ha permitido poner de manifiesto distintas situaciones de sobrevaloración, sigue habiendo 85 barrios pendientes de una actualización catastral".
"Aunque la recaudación por la tasa en 2017 sea inferior a la de 2016, hay negocios que pasarán a pagar el doble. El impacto será la pérdida de cientos de puestos de trabajo. No es justo que, por un cambio de índica de calles basado en aspectos que pueden diferir de la exacta realidad, nuestros emprendedores y autónomos terminen pagando más. Tampoco es justo que haya un efecto escalón tan grande que, por una pequeña variación, se pague el doble por la tasa de terrazas", denuncia Ciudadanos.
Fuentes consultadas por este diario destacan el caso de distintos negocios del Ensanche de Vallecas que, en virtud de los cambios introducidos durante el último año, han pasado de la categoría 7 a la 6. Esto implica una revisión al alza de la cuota, que salta de 10,83 a 20,96 euros. Así, para una terraza de 25 metros, el golpe fiscal crece de 270 a 524 euros.
La propuesta del partido que lidera Begoña Villacís a nivel municipal fue registrada el pasado 16 de junio de 2017 y será llevada a Pleno en los próximos días. El objetivo es reducir un 40 por ciento las cuotas aplicadas a las terrazas de la Villa y Corte. Está por ver qué resultado arrojará la votación en el parlamento local.