El Ayuntamiento de Madrid excedió el límite de gasto público que estipula la Ley de Estabilidad Presupuestaria en algo más de 230 millones de euros en 2016. Parte de este exceso se explica por los 104 millones de euros destinados a la polémica compra del edificio ubicado en el número 45 de la calle Alcalá. Así pues, según la normativa vigente, Ahora Madrid tendría que aplicar un recorte de gasto por esa misma cuantía durante el presente ejercicio para corregir tal desviación mediante la presentación de un Plan Económico Financiero (PEF).
Sin embargo, lejos de llevar a cabo dicha corrección, el concejal de Hacienda, Carlos Sánchez Mato, ha presentado este jueves un PEF en el que, a la vista de su contenido, supone una burla hacia el Ministerio de Hacienda por varias razones.
En primer lugar, porque si bien reduce algo la cuantía, admite abiertamente el incumplimiento de la regla de gasto. En concreto, el Ayuntamiento de Madrid calcula que sobrepasó en 2016 la Regla de Gasto en 233 millones de euros.
En segundo lugar, porque lejos de incluir medidas para subsanar ese desvío, tal y como establece la Ley, justifica el incumplimiento por los siguientes motivos:
- La amortización adelantada de deuda fue penalizada con un coste de 1,8 millones de euros en 2016. Se trata de un gasto que no decidió acometer el equipo de Gobierno (la ley obliga a ello).
- 101 millones de gastos derivados de la ejecución de sentencias y resoluciones judiciales firmes no previstas en 2016 y que son consecuencia de la gestión de gobiernos anteriores. Es un gasto que no decidió acometer el actual equipo de Gobierno.
- Cambio de política de vivienda desde un modelo de venta a un modelo de alquiler, que supone contablemente un incremento del 'gasto' por 70 millones de euros. Es un gasto contable, no real.
- Medidas de ahorro del gasto en alquileres a medio plazo.
- Gastos financiados con ingresos de particulares por valor de 6,6 millones. Hay algunas actuaciones y obras que benefician a particulares, pero que son realizadas por el Ayuntamiento, de forma que éste acaba cobrándoles el servicio a través de impuestos específicos (vados, vallas). Estos gastos han de realizarse obligatoriamente porque provienen de impuestos con finalidad específica. Es un gasto no previsto y no controlable que no debería computar para la Regla de Gasto.
- 428 millones de gasto derivado de competencias impropias que está prestando el Ayuntamiento con sus propios recursos, a pesar de que debería estar financiado por la Comunidad y el Estado. Si tuviesen la financiación que recoge la legislación no computarían en computarían para la Regla de Gasto.
Y, en tercer lugar, porque el Ayuntamiento de Manuela Carmena pretende modificar la regla de gasto por la puerta de atrás. Sánchez Mato propone a Hacienda una nueva interpretación de la regla de gasto acorde a sus intereses, tratando así de liderar una especie de rebelión local contra este principio de austeridad que, entre otras cosas, ha logrado cuadrar las cuentas de los ayuntamientos durante la crisis.
Según Ahora Madrid, "la regla de gasto es una limitación impuesta por la Ley de Estabilidad Presupuestaria que impide a los ayuntamientos aumentar el gasto público más allá de una tasa de referencia basada en el crecimiento de la economía española. El cálculo de esa regla fue diseñado en un periodo en el que la mayoría de corporaciones locales incumplían los objetivos de estabilidad presupuestaria y en el que se consideraba prioritario contener el gasto público local. Sin embargo, en la actualidad la mayoría de los ayuntamientos más importantes cumplen sobradamente los requisitos de déficit, deuda y pago a proveedores, por lo que continuar restringiendo el gasto atendiendo a ese restrictivo cálculo de la regla de gasto resulta contraproducente para las necesidades de los ciudadanos y ciudadanas".
Por ello, pide "una revisión de la interpretación de la Regla de Gasto, para que sea más flexible, así como una serie de medidas que reducirían el gasto computable en dicha norma. Actualmente, el techo de gasto depende del ejecutado el año anterior. Y la propuesta consiste en que esté supeditado al gasto realizado en 2013 (año anterior a la puesta en marcha de la Regla de Gasto). Con esta metodología el Ayuntamiento de Madrid no habría incumplido la Regla de Gasto ningún año", señala el Ayuntamiento.
El "PEF trampa que pretende engañar" a Montoro
El PP, a través de su portavoz adjunto Íñigo Henríquez de Luna, denunció lo que calificó de "PEF trampa". Henríquez de Luna acusó a Sánchez Mato de "volver a las andadas insistiendo en el error de pretender engañar al Ministerio de Economía y Hacienda con un Plan Económico Financiero trampa con el que enjuagar el incumplimiento de la regla de gasto en 233 millones de euros y todo ello sin reducir el gasto publico". La mentira y el trilerismo político tienen las patas muy cortas -defendió- y si lo que Sánchez Mato pretende es engañar al Ministerio con burdos artificios contables lo lleva claro".
Henríquez de Luna denunció también el "brindis al sol del Gobierno municipal, que exige a otras administraciones fondos ficticios para financiar el ejercicio de competencias impropias por importe de más de 400 millones de euros". "Exigimos que Sánchez Mato deje de marear la perdiz, deje de engañar a los ciudadanos con ese victimismo hipócrita y cumpla de una vez con la legalidad. Al final por las buenas o por las malas lo tendrá que hacer", concluyó.
"Freír a tasas e impuestos a los madrileños"
Por su parte, el responsable de esta materia en Ciudadanos quiso subrayar que "cuando Ahora Madrid habla de que han tenido un gran superávit fiscal, éste es base a freír a tasas e impuestos a los madrileños: 415 millones de euros ingresados más de lo previsto en 2016, entre ellos 200 millones de euros en recaudación en multas". Miguel Ángel Redondo señaló en relación al aumento del gasto social que el "40% del presupuesto del área de políticas sociales ha ido a la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS), 157 millones de euros que como único impacto ha sido comprar dos viviendas y empezar a construir 20".
Han incumplido un PEF por 233 millones de euros, recordemos que esto puede llevar a que nos inmovilicen a todos los madrileños 240 millones de euros y multas millonarias. Y lo malo es que no lo ha hecho para aumentar gasto social o bajar impuestos; lo han hecho porque han querido desafiar a Hacienda utilizando a los madrileños como conejillos de indias", denunció. Así, recordó que "han ejecutado el 80% de la inversión en el mes de diciembre, la mayoría no previstas, por lo que queda claro que han buscado el incumplimiento a propósito: buscan el enfrentamiento con Montoro, buscando rédito político a costa de los madrileños".
"A Ahora Madrid le falta capacidad de gestión y lo que le sobran son millones de euros en publicidad, en subvenciones a dedo y en colocar a los amigos. Si recortaran en esto, seguro que cumplían con la regla de gasto", concluyó el portavoz centrista.