Falta un mes para que Baraka, la nueva dueña del Edificio España, reciba la primera licencia que dé luz verde a las obras del histórico inmueble madrileño. Después de la espantada de Wanda, la compañía murciana ha recogido el testigo para convertir el rascacielos en un hotel de lujo y una zona comercial.
Para celebrarlo, el presidente de Baraka, Trinitario Casanova, se ha reunido este martes con todo un elenco de miembros del Ayuntamiento de Madrid, entre los que estaban Manuela Carmena, Rita Maestre o José Manuel Calvo. Todos ellos han aplaudido la puesta en marcha del polémico proyecto. "Alegría es lo que sentimos por haber recuperado el edificio que volverá a ser un hotel como cuando yo lo conocí siendo una adolescente inquieta. Las cosas se arreglan hablando", ha declarado la alcaldesa de la capital.
Casanova se ha marcado un plazo de 2 años para la inauguración de su gran proyecto. Las obras durarán unos 18 meses y tendrán su punto álgido dentro de unos 9 meses, tal y como ha explicado el director general de Baraka, Fructuoso Flores, a Libre Mercado. Lo primero que harán serán "pequeñas demoliciones" y la retirada de los elementos del inmueble que tienen previsto proteger, como relieves, mármoles, la botonera de los ascensores… "Así hasta dejar el esqueleto del edificio", explica. La compañía murciana posee una constructora propia con la que empezará las obras y, además, contará con apoyo externo, aunque no ha querido desvelar el nombre de la empresa.
Obras presupuestadas en 150 millones
Baraka ha calculado que el coste de las obras alcanzará los 150 millones de euros.A esta cifra habría que sumarle los 272 millones que deberá de terminar de pagar a Wanda por la adquisición, 7 millones más que el importe que abonó el conglomerado chino a su anterior dueño: Banco Santander. Casanova ha insistido en que el proyecto se llevará a cabo con fondos propios, aunque analizará cualquier propuesta de financiación.
Casanova ha señalado los elementos que diferencian su proyecto con el de Wang Jianlin. "Es muy distinto. Wanda tiraba el edificio por dentro y dejaba la fachada al aire. En nuestro caso, no lo tiramos, rehabilitamos el mismo, lo que cambia completamente", ha dicho. Además, el empresario murciano ha asegurado que sus planes son más económicos que los del gigante chino. "Rehabilitar siempre es más caro que construir desde cero, pero en este caso es más barato que el proyecto del señor Wang porque ellos, al destruir para luego construir, encarecían el coste. Nosotros no destruimos, sólo rehabilitamos", ha añadido.
El Grupo Wanda decidió vender el Edificio España tras ser incapaz de llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento de Madrid para reformar por completo el edificio. La intención del grupo chino era desmontar piedra a piedra la fachada para después volver a dejarla exactamente igual, una propuesta que rechazó rotundamente Carmena. Wanda argumentaba que su sistema era la opción "legal más segura" y económica.
Hotel de 4 estrellas, dos piscinas y skybar
Riu Hotels&Resorts va a ser la encargada de gestionar el hotel de 4 estrellas que se instalará en el rascacielos. De sus 26 plantas, la hotelera mallorquina ocupará 23 entre las que repartirá más de 600 habitaciones y una piscina. Tal y como ha explicado Casanova, en la última planta del edificio habrá otra piscina y un skybar. Además, el inmueble contará con salones habilitados para congresos y restaurantes temáticos.
La zona comercial ocupará 15.000 metros cuadrados y cuatro plantas (-1, baja, 1ª y 2ª). La entrada principal del Edificio España será la del hotel y a ambos lados del inmueble se ubicarán los accesos a las tiendas.
El empresario murciano se encuentra en la fase de negociación con sus futuros inquilinos. Tras el acto, Casanova ha declarado a un grupo de periodistas que "de las empresas del sector retail, todas" se han puesto en contacto con él, por la gran expectación que genera el proyecto. "Hemos avanzado con algunas y hemos rechazado a otras", ha añadido.
El plan de Baraka es que sea una sola empresa la que se encargue de gestionar los alquileres de la zona comercial como podría ser El Corte Inglés o la francesa Galerías Lafayette. Casanova ha asegurado que con ambas mantiene conversaciones.