El FBI estadounidense ha detenido al responsable de Compliance del consorcio automovilístico Volkswagen en Alemania entre 2014 y marzo de 2015, Oliver Schmidt, por una posible conspiración para defraudar en relación con el caso del software que alteraba las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) de algunos modelos diésel, según indicaron dos fuentes cercanas a la operación al diario The New York Times.
Según dichas fuentes, Schmidt fue detenido el pasado sábado en el Estado de Florida y la previsión es que sea procesado este lunes en Detroit (Michigan). Ante esta situación, la portavoz de Volkswagen, Jeannine Ginivan, indicó que su compañía continúa cooperando con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Ginivan apuntó que no es apropiado comentar ninguna investigación en curso o hablar de temas personales. La detención de Schmidt se produce después de que la compañía con sede en Wolfsburg (Alemania) haya admitido que había instalado dicho software en alrededor de once millones de vehículos en todo el mundo.
En Estados Unidos hay alrededor de 475.000 vehículos con el motor diésel TDI de 2.0 afectados por el caso del software que alteraba las emisiones de los modelos al detectar que estaban siendo objeto de pruebas de laboratorio. Los fiscales generales de los Estados de Nueva York y Massachusetts presentaron demandas contra Volkswagen y acusaron a Schmidt de jugar un papel importante en los esfuerzos de la empresa automovilística de encubrir el caso del software ante las autoridades estadounidenses.
Así, los fiscales generales señalaron que se produjeron explicaciones falsas en relación con los niveles de emisiones de los vehículos de Volkswagen por parte de Schmidt y de otros representantes de la compañía, hasta que en 2015 reconocieron la existente del software.