El gobierno de Ahora Madrid ha disparado notablemente el presupuesto destinado a conceder subvenciones. Sonados son ya los casos de los subsidios concedidos al cine indio o los sindicatos. También ha levantado polvareda el abultado presupuesto de subvenciones que maneja el sobrino político de la alcaldesa Manuela Carmena. De hecho, hasta la asociación que venía dirigiendo su número dos, Nacho Murgui, ha recibido millones de euros en ayudas municipales.
Hasta ahora, eso sí, los subsidios que concede el Ayuntamiento de Madrid se aprueban, al menos en teoría, según la Ordenanza de Bases Reguladores Generales para la Concesión de Subvenciones. Por tanto, hay un corset normativo que viene heredado de anteriores legislaturas y ayuda a frenar la discrecionalidad en la concesión de las ayudas.
Esos "pesos y contrapesos" pueden esfumarse en el caso de que se apruebe el borrador de modificación de la Ordenanza que ya circula por los despachos del gobierno de Ahora Madrid. Libre Mercado ha tenido acceso al documento y ha podido comprobar que el equipo de Carmena pretende tumbar los estándares de control que limitaban el reparto de subvenciones municipales.
Un reglamento propio para los subsidios de "cooperación"
Por ejemplo, el nuevo borrador incluye una regulación específica de las subvenciones de cooperación que debe preocupar a los contribuyentes por tres motivos:
- En primer lugar, conviene recordar que este asunto ya está atendido por las instituciones europeas, nacionales y autonómicas, por lo que la apuesta de Carmena por esta vía supone una clara redundancia en el gasto municipal.
- En segundo lugar, la nueva regulación que incluye el borrador permite separar el procedimiento de concesión de estas ayudas del resto de procesos de tramitación de subvenciones.
- En tercer lugar, es importante destacar que el presupuesto del Ayuntamiento dedicado a esta cuestión ha subido de manera sustancial en 2015 y 2016, por lo que un marco aún más flexible se traducirá, al menos a priori, en un aumento aún más fuerte de los desembolsos que asume el consistorio por este concepto.
El "pago por resultados", relegado
Aparece también un segundo elemento preocupante en el borrador de concesión de las subvenciones. La Ordenanza en vigor incluía un importante avance regulatorio, ya que incluía un esquema de "pago por resultados" que permitía ligar las ayudas concedidas a los logros que esperaba conseguir el Ayuntamiento.
En el borrador esta cláusula pasa a ser opcional y, previsiblemente, dejará de aplicarse siempre que el Consistorio quiera repartir el dinero con menos nivel de fiscalización.
Menos transparencia
Además, en el caso de las subvenciones directas, la norma que aún se está aplicando exige que la aprobación tenga lugar en la Junta de Gobierno del Ayuntamiento, en presencia de la alcaldesa y de todo el equipo de gobierno.
Sin embargo, el nuevo borrador elimina dicho requisito, por lo que no solamente se reduce la publicidad informativa de las ayudas concedidas, sino que también se elimina el control de las subvenciones por parte del Ejecutivo local, quedando sujeta su aprobación al mero "OK" del concejal del ramo.