Un sistema fiscal para crecer en un entorno global. Así se titula el nuevo informe del Círculo de Empresarios, think tank que aspira a influir en el intenso debate político que está generando el sistema tributario español. El documento, publicado esta semana, sale a la luz pide una "reforma integral" encaminada a sentar las bases de una economía más competitiva.
Hasta ahí todo suena muy bien, pero ¿cómo pasar del verso a la prosa? De entrada, el Círculo aborda el Impuesto de Sociedades, para el que los distintos partidos políticos están planteando todo tipo de medidas que redundarían en su endurecimiento. El Círculo no lo ve así y aboga por "establecer un tipo único y más reducido".
Esto se traduciría en la supresión de la mayoría de deducciones y en la adopción de un modelo simplificado que, según el Círculo, debería canalizarse mediante un tipo único situado en torno al 20%. Como ejemplos para la reforma, el documento cita a Suecia, Reino Unido y Países Bajos.
El estudio recuerda que el Impuesto de Sociedades no es una vaca a la que se puede ordeñar de manera infinita. Por ejemplo, cita que el 50% de su recaudación viene soportada por apenas el 0,16% de las empresas declarantes, lo que significa que el grueso de los ingresos viene generado por 2.300 empresas sobre un total de 1,45 millones. Además, el documento recuerda que el número de sociedades con beneficios ha pasado del 65% al 42% entre la época pre-crisis y 2014, lo que ha hecho que la base imponible consolidada pase de 177.514 a 89.728 millones de euros.
IRPF, IVA y cotizaciones
En cuanto al IVA, el documento del Círculo habla también de hacer más sencillo su funcionamiento y pide "reasignar los bienes sujetos al tipo general y reducido, siguiendo el esquema mayoritario de los países de la UE, en especial el caso de Austria y Alemania". Esta reclasificación se traduciría probablemente en un aumento de la recaudación obtenida por este tributo.
El Círculo habla también de las cotizaciones a la Seguridad Social y apuesta por "reducir la carga sobre el empleador y, paralelamente, avanzar progresivamente hacia un esquema contributivo de reparto más equilibrado". En los años 90, el Círculo había promovido con fuerza la capitalización de las pensiones, pero este nuevo documento habla solamente de adoptar reformas en el sistema de reparto, en línea con lo que ya han hecho Alemania, Países Bajos o Reino Unido.
Para el IRPF, el documento del Círculo habla de "aumentar la recaudación al ampliar las bases imponibles vía creación de empleo", pero no se hacen propuestas mucho más precisas. El documento sí pide "equiparar" los tipos superiores a la media de la OCDE o de la Eurozona, pero no detalla de qué umbrales estamos hablando.
Lucha contra el fraude: el palo y la zanahoria
Para la "lucha contra el fraude y la economía sumergida", el Círculo de Empresarios propone usar el palo y la zanahoria. Hay medidas de castigo, como la intensificación de los recursos de la Agencia Tributaria o la generalización de los pagos electrónicos. Hay también incentivos, como los encaminados a aflorar y regularizar las actividades no declaradas. Para este segundo punto, el documento pone como ejemplo a seguir a los Países Bajos y Noruega.
¿Y los impuestos autonómicos?
La propuesta del Círculo de Empresarios lamenta "los tremendos costes de gestión" y "las distorsiones" que se derivan de los "más de 70 impuesto autonómicos y tributos locales". En clave de fiscalidad empresarial, el documento habla de trasladar exclusivamente esta competencia al Estado, "para facilitar la unidad de mercado".
En cuanto al resto de gravámenes, el Círculo no se atreve a pedir su abolición pero sí habla de "minimizar los impuestos sobre el Patrimonio, las Sucesiones y las Donaciones", ya que constituyen "una sobreimposición al ahorro y una figura tributaria prácticamente desaparecida en otros países".
Fiscalidad para engordar al tejido empresarial
El Círculo remata la faena hablando de qué se puede hacer para engordar el tejido empresarial de nuestro país. En este sentido, habla de "fomentar el crecimiento del tamaño medio de la empresa española" a base de "elevar el umbral de facturación en los pagos fraccionados del Impuesto de Sociedades y la liquidación del IVA" y de "elevar de 6 a 20 millones de euros el punto de entrada en la Unidad de Grandes Contribuyentes".
El documento también pide reintroducir un "régimen de exenciones por reinversión" en el Impuesto de Sociedade y de crear módulos "especiales de IRPF, estables y únicos, para favorecer la retención y atracción del talento, así como la instalación de multinacionales en España".