El escepticismo hacia nuestros representantes no para de crecer en España pero, al mismo tiempo, cada vez mostramos más interés por el día a día político. Así lo constata el nuevo informe de FUNCAS, titulado Retos a la democracia y el espacio público y volcado en resumir las conclusiones de una gran encuesta realizada a lo largo de la primera mitad de 2016.
Empecemos por lo primero. Según el trabajo de FUNCAS, el 77,3% de los españoles cree que los políticos no se preocupan por gente como ellos, frente al 22% que siente lo contrario.
Este nivel de rechazo a la clase política es inédito en toda la serie estudiada por el CIS. Como recuerda FUNCAS, el porcentaje de españoles que piensa así se ha movido históricamente entre el 60% y el 70%, con tendencia al alza en los años de Felipe González y a la baja en el tiempo de José María Aznar. Sin embargo, los últimos diez años han supuesto un punto de inflexión y, sobre todo a raíz de la crisis, se ha disparado el recelo hacia los políticos.
Pero los profundos cambios políticos que se han derivado de la irrupción de Podemos y Ciudadanos no parecen haber generado un punto de inflexión. Es más: la opinión que tienen los españoles del panorama político es tan negativa que un 83,3% opina que "los políticos de todas las tendencias descalifican al adversario para desviar la atención del hecho de que no son capaces de resolver los problemas del país".
De hecho, frente al discurso pactista que hemos escuchado en los últimos meses por parte de la mayoría de formaciones, vemos que el 63,2% de los españoles cree que "muchos políticos tratan de intensificar los sentimientos de hostilidad de sus bases sociales contra los partidos", con el objetivo de "hacer imposible un compromiso con ellos".
Conceptos de derecha e izquierda
Según la encuesta de FUNCAS, el 39,1% de los españoles cree que las nociones de derecha e izquierda están "superadas" y "no sirven para evaluar las tomas de posición de los partidos". Por el contrario, hay un 53,3% que sí cree que estos conceptos permiten enmarcar los debates políticos.
El papel de los medios
El caso es que, a pesar del creciente recelo que se deduce de las distintas respuestas a las preguntas de la encuesta, los datos del CIS que ha analizado FUNCAS muestran que, en paralelo, el interés de los ciudadanos por la política ha ido en aumento.
Algo parecido ocurre si nos fijamos en la frecuencia con la que los españoles hablan de política con sus amigos. También aquí se detecta un cambio hacia una sociedad más marcada por las inquietudes políticas.
Por último, FUNCAS pregunta a los encuestados si tienden a evitar conversaciones con personas de ideas diferentes a las propias. El 65% dice que no lo hace, pero un 30% admite que prefiere mantener estas conversaciones con personas de ideas afines.