El porcentaje de población ‘nini’ influye en el producto interior bruto de un país. Esta es la afirmación que defiende y corrobora el estudio ‘Young Workers Index’, realizado por la consultora PwC. ‘Nini’, un término muy conocido y usado en España -desde que comenzara la crisis- y que se refiere a la población joven de un país que ‘ni estudia, ni trabaja’.
El estudio, que se ha realizado en base a los 35 países que forman la OCDE, sitúa a España en el puesto número 32 del ranking, con un 29% de jóvenes que ni estudian ni trabajan, mejorando en una posición respecto al año pasado. Suiza, Alemania y Austria, que ocupan el primer, segundo y tercer puesto de la lista, respectivamente, han reducido su puntuación respecto al último estudio, pero han mantenido la posición en el ranking. España solo consigue superar a Grecia (34) e Italia (35), dos de los países más afectados por la crisis.
Si comparamos los datos del año 2006 con los de 2015, Israel (9) es el país que más ha mejorado, pasando del puesto 34 al 9. Le siguen Luxemburgo (16), que ha recortado 11 posiciones, y Alemania que ha pasado de la posición 9 a la 2. Por otro lado, entre los países que más han bajado dentro de la clasificación está Irlanda, que ha pasado del puesto 8 al 29, y España, del puesto 20 al 33.
Si todos los países consiguiesen reducir el número de ‘ninis’ y llegar a la tasa de Alemania (10,1%), sus economías conseguirían unas ganancias totales de 1,04 billones de euros. El PIB con mayor potencial de crecimiento a largo plazo sería Turquía, que lo incrementaría en un 8,9%, seguido de Italia, con una subida del 8,4%, Grecia, con un incremento del 7,2%, y España en cuarta posición, con un 6,4% extra, lo que significa casi 70.000 millones de euros.
Suiza mantiene la primera posición desde hace 9 años. Un 70% de los jóvenes participa en un programa que ofrece educación y formación de más de 200 tipos de ocupaciones y con el que trabajan una tercera parte de las empresas suizas.