Para guiar el rumbo de la política económica alemana, el gobierno teutón creó en 1963 un organismo consultivo conocido popularmente como el "consejo de los cinco sabios". Esta entidad juega un rol centrar a la hora de guiar al Ejecutivo germano en la toma de las grandes decisiones.
Esta semana, el "consejo de los cinco sabios" ha dado a conocer su informe anual, que servirá como pilar para las próximas decisiones de la canciller Ángela Merkel. El documento incluye propuestas para Alemania, pero centra su análisis en el plano europeo, por lo que sus conclusiones son relevantes para toda la Eurozona, sobre todo por el duro tono de algunas recomendaciones.
Críticas al BCE
Según el informe anual del consejo, el crecimiento en Alemania va a llegar al 1,9% en 2016 y al 1,3% en 2017. La proyección para la Eurozona apunta a un aumento del PIB del 1,6% durante el presente ejercicio y un repunte del 1,4% a lo largo del siguiente año. Sin embargo, el "consejo de los cinco sabios" entiende que el crecimiento alemán cuenta con bases mucho más sólidas que el del resto de países integrados en la moneda única.
Así, los cinco sabios denuncian que la política monetaria del Banco Central Europea ha sido "extraordinariamente flexible", lo que ha contribuido a la recuperación por la vía de reducir la urgencia de aplicar reformas. Para los asesores del gobierno teutón, "la recuperación económica no está siendo adecuada, dado que persisten los problemas estructurales y el repunte del crecimiento no es sostenible".
Según denuncian los expertos germanos, "el empeño reformista está decayendo y algunos países miembros no demuestran la disciplina presupuestaria necesaria". Mirando adelante, el informe apunta que "salir de una política monetaria tan expansiva se está convirtiendo en un reto cada vez más complejo".
La UE tras el Brexit
En clave europea, los sabios apuntan que "en campos como la seguridad, la inmigración o el medio ambiente, es deseable una mayor integración europea. Sin embargo, los asuntos fiscales, laborales y sociales deben seguir siendo una responsabilidad de los gobiernos nacionales".
El organismo entiende que aprobar los tratados comerciales con Estados Unidos y Canadá es un reto crucial para el Viejo Continente, sobre todo a raíz del Brexit. Los expertos teutones entienden que "impulsar reformas es fundamental, porque si los resultados económicos de la Unión Europea no mejoran, habrá nuevos contratiempos en el proceso de integración".
De hecho, el consejo apunta que "habida cuenta de las crecientes fuerzas centrífugas en la UE, hay que entender con inteligencia la subsidiariedad: en algunos campos, como la seguridad, la inmigración o el medioambiente, es deseable que haya más cooperación entre los países miembros; sin embargo, en el plano fiscal, laboral o de las políticas sociales, la responsabilidad debe permanecer en el plano nacional".
En cuanto a las normas de estabilidad fiscal, el mensaje que mandan los asesores de Merkel es claro: "las reglas deben hacerse cumplir". Mirando al futuro, los sabios hablan de la importancia de concebir eventuales "rescates" desde el punto de vista privado y no público, pasando del bail out al bail in.
Toque de atención a Merkel
Pero el documento incluye además una serie de advertencias que deben leerse en clave nacional, ya que están dirigidas al gobierno de la canciller Merkel. Por ejemplo, el "consejo de los cinco sabios" señala que "la mejoría de los márgenes presupuestarios no debe utilizarse para gastar más, sino para reducir la deuda pública y para impulsar reformas fiscales".
A pesar de la crisis, Alemania ha avanzado con paso firme hacia la estabilidad presupuestaria, modificando su Constitución y sus reglas presupuestarias para hacer posible un superávit presupuestario que alcanzó los 18.500 millones de euros durante la primera mitad de 2016. Pero los sabios insisten en que esto no debe llevar a la relajación e insisten en que Alemania "debe ser un ancla de estabilidad fiscal para la Eurozona".
De hecho, el consejo considera que el margen presupuestario necesario para aprobar cualquier medida de gasto adicional debe obtenerse previo recorte de otras partidas de gasto, y nunca vía recorte del superávit. Además, los sabios recomiendan que, en caso de introducirse cambios, lo deseable no son "medidas de estímulo" sino recortes de la fiscalidad empresarial o reformas tributarias encaminadas a ensanchar bases y reducir tipos.
También señala el informe que Alemania debe "revisar el sistema de pensiones, fortaleciendo el pilar del ahorro privado que generan empresas y trabajadores". Además, los asesores apuntan que "la llegada de refugiados e inmigrantes no requiere más regulación laboral, sino un mercado de trabajo más flexible, con más movilidad y menos paro".
Pero los expertos también le echan un capotazo al gobierno de Merkel a la hora de abordar el debate sobre la desigualdad: "las diferencias, ya sea en el plano de los ingresos o en lo tocante al patrimonio, se han mantenido prácticamente constantes durante la última década. En cualquier caso, la mejor forma de potenciar la inclusión económica es mantener un mercado laboral flexible, mejorar la educación y potenciar la movilidad social. que no debe hacerse es introducir impuestos al patrimonio, que lo único que hacen es introducir distorsiones.
"La banca no es lo suficientemente resistente"
Quizá con un ojo puesto en la crisis del Deutsche Bank, el informe anual de los cinco sabios proclama que "las turbulencias que estamos viendo en los mercados financieros muestran que el sector no es lo suficientemente resistente a los golpes".
En documento insiste en la necesidad de aumentar la capitalización de las entidades. Inciden también los expertos en la importancia de reducir el apalancamiento y las deudas que recogen los balances del sistema bancario.