La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid celebrada el pasado 13 de octubre ha vuelto a poner de manifiesto el sectarismo con el que actúa el Gobierno de Manuela Carmena a la hora de diseñar su política tributaria. Lejos de tratar con neutralidad a los contribuyentes madrileños, Ahora Madrid anunció una subida del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) que recae principalmente sobre los distritos que más votan al PP.
Pero es que, además, esta decisión tampoco se justifica en términos presupuestarios. La Administración de Carmena heredó un elevado superávit del gobierno anterior, por lo que las cuentas municipales están en orden y las subidas de impuestos que está aprobando el equipo de Ahora Madrid no responden a ningún criterio fiscal, sino a la voluntad de exprimir a determinados contribuyentes.
Un dato clave
De hecho, Libre Mercado ha tenido acceso a documentación del Ayuntamiento que confirma la voracidad fiscalcon la que actúa el delegado de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato. Se trata del informe de ejecución presupuestaria para el periodo comprendido entre enero y agosto de este mismo año. Según dicho informe, Ahora Madrid esperaba que el IVTM generase 130,6 millones de euros al final de año… Pero en agosto ya se había rebasado ampliamente esta cifra.
Así, el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica anota ya una obligación reconocida aún no recaudada de 151,3 millones de euros para los primeros ocho meses del año, muy por encima del objetivo anual de 130,6 millones que consta en los presupuestos del Consistorio. Por tanto, la recaudación para enero-agosto supera en 21 millones lo previsto para enero-diciembre, dato que demuestra la voracidad recaudatoria de Carlos Sánchez Mato, Manuela Carmena y el gobierno de Ahora Madrid.
Esta voracidad recaudatoria que vemos con el IVTM coincide con el patrón observado desde que Carmena llegó al Ayuntamiento madrileño. En su primer presupuesto, Ahora Madrid ya aprobó diversas subidas fiscales que, al final del ejercicio, aumentaron la recaudación en más de 168 millones de euros. Todo esto a pesar del superávit presupuestario que se encontró la coalición podemita que comanda Carmena. Aquella decisión recayó principalmente sobre 20.000 negocios y comercios de la capital.
Algo parecido ocurre con las multas de tráfico, donde también vemos que el consistorio es una auténtica máquina de recaudar dinero. Según explicó Libre Mercado el pasado mayo, el Ayuntamiento de Madrid pone cuatro multas por minuto a los conductores que circulan por las calles de la Villa y Corte.
"Carmena castiga por cuestiones ideológicas"
El grupo municipal de Ciudadanos lleva tiempo denunciando que esta voracidad recaudatoria resulta aún más incomprensible ante la baja capacidad de ejecución presupuestaria que está demostrando el Ayuntamiento de Madrid. "Teniendo en cuenta lo que apuntan las ejecuciones presupuestarias, todo indica que a final de año veremos que una gran parte de las inversiones y los gastos anunciados no se habrán realizado. Por tanto, Ahora Madrid actúa de forma sectaria, pero también ineficaz", apuntan.
En esta línea, la formación naranja tiene claro que Ahora Madrid viene de aprobar unas ordenanzas fiscales que "no atienden a la eficiencia ni al reparto justo de los impuestos y las tasas. El único objetivo aquí es la propaganda y el castigo por cuestiones ideológicas".
Miguel Ángel Redondo, concejal del grupo que lidera Begoña Villacís, ha explicado a este periódico que "de forma burda, veremos que al final la mayoría de los madrileños va a terminar pagando más impuestos en 2017 que en 2016, diga lo que diga Ahora Madrid".
Redondo cree que "si en el IVTM vemos que en agosto ya se había superado en 21 millones el objetivo de recaudación de todo el año, ¿es necesario aumentar más aún los impuestos? ¿No es ya suficientemente elevado el nivel de impuestos actual?". El edil de C's recuerda que "en 2015, el Ayuntamiento ya recaudó 500 millones más de lo previsto" y advierte, además, de las consecuencias inesperadas que puede tener la subida del numerito.
"Dicen que lo suben para que paguen más impuestos los coches de alta gama, pero el efecto será un aumento de las matriculaciones en los pueblos aledaños a Madrid, donde el pago por estos impuestos es mínimo", denuncia Redondo, que ve "pura demagogia y populismo" en la subida del IVTM.
El impuesto a los cajeros, otra polémica
Redondo denuncia también que Sánchez Mato "instaura una tasa a los bancos por los cajeros automáticos a pie de calle… y lo que va a recaudar es el 0,0001% de los ingresos anuales que espera tener el Ayuntamiento. A eso hay que sumarle que esa tasa se repercutirá sobre los clientes. Y, por si no fuese suficiente, Ahora Madrid oculta que la presión fiscal sube para la mayoría de los ciudadanos, que van a pagar más IBI". Sobre el IBI, C's entiende que "este impuesto se ha multiplicado por tres en los últimos años y ha llegado el momento de bajarlo de forma generalizada".