El ránking anual que elabora la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) sobre los supermercados más caros y más baratos de España siempre genera mucha expectación entre la clientela. Esta semana, la OCU desvelaba que Supermercados Dani es la cadena más barata de nuestro país, seguida de Alcampo y Deza.
No es la primera vez que la enseña Dani se hace con tan prestigioso galardón. "Hemos sido los más baratos en otras 16 ediciones del informe", presume el adjunto a director general de Supermercados Dani, Sixto Sánchez, en una entrevista con Libre Mercado. Los informes de la OCU suponen "una gran repercusión para nosotros a nivel nacional", admite. "Ellos mandan a sus inspectores a comprar a algunos de nuestros supermercados y recogen los datos por el ticket de compra. No sabemos quiénes son, ni cuándo vienen", explica.
Si usted vive fuera de Andalucía, puede que nunca haya oído hablar de esta compañía, pero lo cierto es que lleva funcionando en nuestro país desde hace casi medio siglo. Su fundador, Daniel Lozano, empezó en el año 1959 regentando un establecimiento de alimentación que bautizó como Comestibles Dani. A sus 73 años todavía sigue al frente del negocio.
"Desde los inicios, el objetivo que se planteó Daniel Lozano era dar los mejores precios y vender más que nadie, aunque fuera en una pequeña tienda de 20 metros cuadrados", relata Sixto Sánchez.
Fue en el año 1971 cuando abrió su primer supermercado en Granada, donde en la actualidad cuenta con 15 tiendas. "Fue todo un éxito de ventas. Había veces que tenía que cerrar la tienda al mediodía para reabastecer las estanterías", añade. Tuvieron que pasar 24 años para que esta firma aterrizase en Málaga, donde ahora tiene dos. En Jaén y en Almería también cuentan con un local. En total, poseen una plantilla de 400 empleados.
Supermercados Dani no tiene entre sus planes salir de Andalucía, ni probar suerte en las grandes capitales españolas. "Nuestra mercado es otro. Aquí hay todavía mucho espacio", asegura Sánchez.
Las claves de su negocio
El representante de la cadena ha señalado varios motivos para explicar las claves de la estrategia de su compañía.
- El precio: compran un gran volumen de producto que les permite tener un alto poder de negociación en el precio. Reducen su margen de beneficios para compensarlo con las ventas, ya que sus artículos tienen una gran rotación. Además, al pertenecer a IFA, pueden obtener unos precios más atractivos del producto seco, como las conservas o los refrescos
- El producto fresco. "Es nuestro gran fuerte y supone el 35% de las ventas", asegura Sánchez. Apuestan por el comercio local y sus camiones no hacen rutas de más de 2 horas. "Tenemos una red de distribución muy fuerte". Reponen las tiendas de frescos por la mañana y por la tarde. "El objetivo es que por la noche las cámaras queden vacías", cuentan.
- 24 horas: "Siempre hay gente trabajando en los establecimientos", explican. "A las 12 de la noche van a buscar el producto para que a las 4 de la madrugada esté en la tienda y a las 10 de la mañana a la venta".
- Atención personalizada: "Tanto en la carne como en la fruta, todos los clientes son atendidos. No hay autoservicio, lo que evita la merma del producto por el manejo de clientes", afirman.
- Empresa familiar: funcionan con financiación propia, no tienen accionistas ni franquicias "Todas las semanas me llegan 20 solicitudes de personas que les gustaría ser franquiciados, pero lo rechazamos", asegura Sánchez. Los dos hijos del fundador están listos para heredar el negocio.
Y cuando llega Mercadona...
Aunque el producto fresco es el punto fuerte de la cadena, desde hace unos años también se han centrado en la marca blanca. "Nos ha enseñado mucho Mercadona, que son muy buenos y muy rápidos", reconoce Sánchez.
De hecho, el presidente de Mercadona, Juan Roig, es uno de los empresarios más admirados por el fundador de Supermercados Dani. "Llegaron a trabajar juntos hace muchos años y se tienen un gran cariño y respeto", declara Sánchez.
El desembarco de Mercadona en Granada no estropeó la relación de estos dos experimentados empresarios. "Llegaron hace unos 10 años y claro que imponían". Pero según recuerda el portavoz de la empresa "Mercadona también lo pasó mal. Fue una guerra a muerte".
"Lo primero que pensamos es que nos teníamos que poner las pilas, involucrarnos más con la empresa y echar a rodar la marca blanca o nos quedábamos fuera", relata Sánchez. Aunque la compañía valenciana ya cuenta con 30 establecimientos en Granada, el doble que Supermercados Dani, "la situación ya se ha estabilizado. Ya estamos todos más tranquilos", concluye.