La opción de estudiar en el extranjero es algo a lo que cada vez recurren más jóvenes españoles con el fin de completar su preparación y abrirse las puertas de un mercado laboral que se presenta cada vez más competitivo.
Como en todo tipo de mudanzas a otro país, el cambio no sólo conllevará el traslado de objetos materiales como ropa o libros, sino también un sinfín de preparaciones, papeleos y trámites que resultan imprescindibles para funcionar con tranquilidad y sin problemas en una nación extranjera. Y, sin duda, uno de los mayores quebraderos de cabeza para los que deciden irse a otro país a estudiar es el envío de dinero a su lugar de destino.
La aventura que acometen los estudiantes emigrantes no tiene otro fin que buscar un futuro mejor, en el que la inversión que van a realizar, no sólo económica, sino también temporal, resulte rentable a medio y largo plazo, con mayores posibilidades de encontrar un puesto de trabajo acorde a su preparación y a su ambición.
Pero los gastos que conlleva esta odisea no suelen ser escasos ni mucho menos. A los expendios naturales del traslado hay que añadir los costes de la matrícula que, probablemente, sean bastante altos, así como todos los pagos corrientes que supone vivir fuera de casa, como la renta, la comida, el transporte, etc. Considerando que la mayoría de los estudiantes españoles que se van no cuentan con ingresos o, si lo hacen, no suelen ser suficientes como para subsistir por sí mismos, se antoja necesaria la búsqueda de un modo de enviar dinero al extranjero que sea seguro y, a la vez, rentable.
Las transferencias bancarias suelen tener costes, más aún cuando se trata de transferencias internacionales, y, en un supuesto como el de un estudiante en el extranjero, los envíos internacionales de dinero habrán de ser, o bien frecuentes, o bien considerables en lo que respecta a la cantidad enviada. Sea cual sea la opción que se elija, tanto si es un único envío de bastante dinero como si son varias transferencias más pequeñas, los gastos y comisiones de éstas pueden acabar suponiendo un montante muy alto y, por ello, hay que buscar la mejor manera de realizarlos, para que la inversión que suponen estos estudios también pueda suponer algo más rentable a corto plazo.
Recomendaciones para estudiantes
Una de las primeras cosas que hay que hacer al trasladarse a otro país, y no sólo para los envíos de dinero, es abrirse una cuenta bancaria local. En muchas entidades suele haber planes y propuestas específicas para estudiantes, por lo que siempre es útil contar con la documentación necesaria de la escuela o universidad además de la identificación y visa pertinentes.
Las oficinas de estudiantes internacionales y las oficinas de admisiones suelen contar con servicios de asesoramiento en estos y otros temas, por lo que es recomendable tener en cuenta su ayuda a la hora de dar los primeros pasos.
Una vez que se ha abierto la cuenta bancaria en una entidad local, requisito imprescindible para realizar las transferencias internacionales desde el país de origen, se debe realizar un estudio sobre las distintas opciones para hacer llegar el dinero. No todos los casos son iguales, ya que, dependiendo del país de destino, las tasas o sobrecostes pueden suponer un alto porcentaje que encarecerá cada una de las operaciones.
Por esta razón, la mejor opción es contar con un servicio de transferencias internacionales que sea seguro, con experiencia en las gestiones entre las distintas naciones y, a su vez, económico. Contar con un asesor para envíos de dinero al extranjero y cambios de divisa como FXcompared.com no sólo supondrá un ahorro considerable a corto y largo plazo, sino también un plus de tranquilidad y seguridad tan necesarios cuando uno se encuentra en un lugar extraño y lejano.