El presidente de Banco Popular, Ángel Ron, ha defendido la ampliación de capital de 2.500 millones anunciada este jueves por la entidad como un "ejercicio de anticipación para fortalecer el banco ante un entorno desafiante".
En declaraciones a Europa Press, el primer ejecutivo del Popular ha explicado que la entidad ha optado por fortalecer su capital y acelerar las desinversiones de activos improductivos "en un entorno poliédrico de muchas y diversas incertidumbres", pero en el que a pesar de todo la economía crece y el sector inmobiliario mejora de forma sostenida.
"Tras un proceso de reflexión largo y después de constatar que hay buen acceso al crédito, apetito inversor por la entidad y un derecho de suscripción preferente a precio ventajoso para el accionista, nos hemos dicho: vayamos para adelante y fortalezcamos el banco", ha enfatizado, para destacar a renglón seguido que una de las prioridades era acelerar la desinversión en ladrillo y fortalecer el negocio del banco en su nicho principal: los servicios a pymes y autónomos.
Además de acelerar la venta de activos improductivos brutos por hasta 15.000 millones entre 2016 y 2018, la ampliación de capital permite al banco hacer frente a los escenarios que se puedan presentar en el futuro inmediato, plagados de incertidumbres (tipos de interés cero, necesidad de desapalancamiento de la economía española, riesgos reputacionales del sector, etc.) algunas también de tipo regulatorio, tal y como advierte Ron.
Entre las medidas anunciadas al mercado está la muy probable suspensión del dividendo este año si se materializan dichas incertidumbres, pero con la intención de retomarlos en cuanto la entidad registre beneficios trimestrales en 2017, y se marca como objetivo un ratio de pago de dividendo en efectivo de al menos el 40% para 2018.
La entidad también reforzará sus coberturas, que podrían alcanzar los 4.700 millones de euros, lo que podría derivar en pérdidas contables para el presente ejercicio. "Sí, es probable que cerremos el año con pérdidas, pero vamos a tener un nivel de capital y una solvencia muy altos", ha esgrimido.
Preguntado sobre si esta operación garantiza la independencia de Popular o cree que debe avanzar hacia una fusión con otra entidad española o europea, en línea de lo aconsejado por el BCE y la Autoridad Bancaria Europea (EBA por sus siglas en inglés) para el sector, Ron se ha limitado a señalar: "Nosotros nos fortalecemos ante un entorno desafiante, y después ya veremos".
Cuenta con el apoyo de Aliseda
Respecto a los mecanismos de los que se servirá el banco para acelerar la desinversión de inmuebles, ha señalado que cuenta con la colaboración de Aliseda, firma en la que tiene una participación del 49% y que, en su opinión, "lo está haciendo bien", pero también baraja realizar operaciones en el mercado mayorista. "Se va a facilitar el desagüe de los activos porque vamos a tener un colchón mayor", ha argumentado.
Ángel Ron ha restado importancia a la caída en Bolsa superior al 20% que registraban en la jornada las acciones de la entidad. "Es lo normal. En un día malo es normal que los títulos reaccionen a la baja", ha señalado, pero ha llamado la atención de que en algunos momentos de la sesión ha cotizado por encima del precio teórico sin derechos ofrecido en la ampliación, algo que ha considerado como un buen augurio.
Por último, ha descartado que la caída en Bolsa del resto de entidades financieras tenga que ver con dudas sobre la solvencia del sector que podría haber puesto sobre la mesa la ampliación de capital del Popular. "La banca está cayendo hoy como subía ayer. No hay nada más allá", ha concluido.