El salario medio bruto en España se situó en 1.640 euros al mes en 2015, lo que supone un aumento del 0,4% respecto al año anterior. Aunque es un incremento pequeño, supone un cambio de tendencia al revertir los descensos de los dos ejercicios previos.
De hecho, se trata de la remuneración media más alta de los últimos cinco años, tras acumular una subida del 1,5% desde 2010 (unos 25 euros extra al mes), según el último estudio salarial elaborado por la empresa de recursos humanos Adecco.
El informe utiliza el salario ordinario bruto -que excluye las pagas, las horas extraordinarias, los pagos por atrasos, las indemnizaciones y las deducciones y retenciones que correspondan-, extraído de la Encuesta Trimestral de Coste Laboral del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por sectores, la Industria presenta el sueldo medio más alto (1.894 euros al mes), tras subir un 0,1% en 2015 y un total del 6,9% desde 2010. La remuneración media en la industria no ha dejado de crecer a lo largo de la crisis; en el otro extremo, se encuentran los Servicios, con un sueldo medio de 1.593 euros, un 0,5% más que en 2014, pero apenas un 0,2% superior al registrado hace un lustro; mientras que en la Construcción, el avance ha sido del 0,1%, hasta llegar a 1.630 euros.
Además, gracias a la caída de precios, la capacidad adquisitiva de los españoles ha mejorado aún más. En concreto, el salario medio ganó el año pasado un 1% de capacidad de compra, gracias a la caída del IPC (-0,6%) y a la ligera subida nominal (-0,4%), con lo que ya acumula dos años de recuperación.
Desde 2010, el sueldo medio bruto de los españoles ha acumulado una pérdida de poder adquisitivo del 4,5%, equivalente a 912 euros anuales menos, debido a la congelación y/o rebajas de sueldos y las tímidas subidas de precios que se han registrado en algunos ejercicios. Sin embargo, el actual contexto de subidas salariales y bajos precios está revirtiendo esta situación.
Los salarios ganaron poder de compra el año pasado en los tres grandes sectores económicos, que llegó al 1,1% en el caso del sector servicios, al 0,8 % en la construcción y al 0,7% en la industria. No obstante, si se toma como referencia el último lustro solo en la industria se ganó capacidad de compra (0,6%), mientras que en la construcción se perdió un 2% y en los servicios, un 5,7%.